El secretario xeral da Emigración de la Xunta, Antonio Rodríguez Miranda, puso a los gallegos del País Vasco como ejemplo del equilibrio entre la integración de los emigrantes en sus países de destino, y la conservación de su identidad. El responsable autonómico aprovechó la 33ª edición del Día de Galicia en Euskadi, que tuvo lugar en la localidad alavesa de Llodio el pasado 17 de junio, para felicitar a la Irmandade de Centros del País Vasco, integrada por trece entidades gallegas.
Durante el acto, que contó con la asistencia del alcalde de Llodio, Natxo Urkixo Orueta; el consejero de Cultura y Política Lingüística del País Vasco, Bingen Zupiria Gorostidi; el exjugador de baloncesto Fernando Romay, quien ejerció de pregonero; y los presidentes de todos los centros de la Irmandade, Miranda apostó por la unidad de las entidades gallegas en el exterior como fórmula para reforzar su peso y su representatividad.
“El de Galicia es un día para dar paso a todos esos gestos valientes que nos unen a quien ya los dio antes por nosotros, a la gente que nos abrió el camino para poder reivindicar hoy que somos exactamente lo que queremos ser: gallegos y vascos, sin renunciar a nada”, destacó Miranda.
Más de 3.200 personas están representadas en la Irmandade de Centros del País Vasco a través del Centro Gallego de Ermua, la Casa Cultural de Galicia ‘As Burgas’ de Eibar, la Sociedad Cultural Recreativa Carballeira, la Casa de Galicia en Bilbao, la Enxebre y Pelengrina Confradía de la Queimada en el País Vasco, la Asociación Centro Gallego de Álava, la Casa Cultural de Galiza de Elgoibar, la Casa Galicia de Ondarroa, la Agrupación Hijos de Galicia, el Centro Gallego de Bizkaia en Barakaldo, el Centro Gallego de Llodio, la Casa de Galicia en Santurtzi y la Casa de Galicia en Gipuzkoa.