El Plan Estatal de Vivienda 2018-2021, aprobado por el Gobierno, permitirá incrementar la oferta de vivienda pública y privada destinada al alquiler y facilitará el acceso a la misma para aquellas personas con menos recursos. Además, en el plan las subvenciones no sólo no se han recortado, sino que se han incrementado considerablemente, un 62,5%, hasta los 1.443 millones de euros.