Marea Granate denuncia que la normativa electoral ha vuelto a diezmar la participación de los españoles del exterior

Relata los diferentes problemas que han padecido los residentes en el extranjero para votar, los que pudieron hacerlo, en las elecciones generales del 28A

Urna con votos del exterior en el escrutinio del pasado 1 de mayo.

El colectivo Marea Granate ha denunciado que la actual regulación del voto exterior ha vuelto a diezmar la participación de los ciudadanos españoles residentes en el extranjero esta vez en las elecciones generales del pasado 28 de abril.

En una nota de prensa, Marea Granate desgrana algunos de los problemas que han tenido que afrontar los residentes en el extranjero para ejercer un derecho básico en democracia como es el derecho al voto.

Comenzando por la inscripción en el Censo Electoral de Residentes Ausentes (CERA) y el proceso de subsanación de errores, que la legislación electoral reduce a una semana -del 11 al 18 de marzo- durante la cual se produjeron, según indica la nota de prensa, “caos informativo” y “largas filas” de espera en consulados como los de Bruselas (Bélgica), Santa Cruz de la Sierra (Bolivia) o Amsterdam (Holanda). En este sentido, el caso más sangrante fue el de Londres “donde solo se atendía para inscripción consular con cita previa, pero se daba cita previa para abril, es decir, fuera del plazo habilitado para subsanar errores. Tras distintas demandas de la ciudadanía exterior y de Marea Granate, en Londres se tuvo que habilitar la Embajada para realizar ese trámite”, afirma Marea Granate.

También señalan que los residentes temporalmente en el extranjero (ERTA) tienen que rogar el voto personalmente en el consulado, con la dificultad que supone en muchos países tener desplazarse desde el lugar de residencia al consulado más cercano, o incluso viajar a otro país para poder hacerlo. Marea Granate señala que esto se podría haber evitado dando esta facultad a los consulados honorarios. “Este era un mecanismo permitido en anteriores convocatorias que facilita el trámite de inscripción para quienes no vivan cerca de ciudades donde hay consulados; sin embargo, en esta convocatoria electoral (y en la siguiente) este mecanismo ha sido expresamente impedido por indicación de los Consulados Generales”, señalan.

Marea Granate explica en la nota de prensa que, los electores CERA pueden rogar su voto por carta postal –“sin que haya seguridad de que llegue”-, por vía telemática con el certificado electrónico –“que hay que recibir previamente, y en este caso, la página web donde se hace este trámite estuvo inactiva la mayor parte del tiempo”- o por fax –“con dificultades obvias como la de dónde encontrar un lugar donde aún exista esta máquina, además del colapso de los faxes de las juntas electorales”-.

Por ellos, señalan, “desde Marea Granate denunciamos que este sistema de ruego es ineficaz, por los plazos tan limitados y por los medios tan obsoletos, además de la falta de información constante con las que nos hemos encontrado en consulados y embajadas”.

Indican que, por ejemplo, en Estocolmo se obligó a muchos estudiantes erasmus que solo iban a residir unos meses en el país a inscribirse como electores residentes ausentes (CERA), al contrario de lo que se establece en la legislación, y en Sao Paulo, a numerosos residentes ERTA se les entregó el formulario del ruego de voto de los residentes CERA, indicando que ellos mismos debían enviar directamente la documentación a las Juntas Electorales Provinciales, cuando este no es el procedimiento requerido para los votantes ERTA, por lo que estos votos hubieran sido nulos. Marea Granate denunció este caso y el propio Consulado tuvo que rectificar y contactar a estos votantes para subsanar su error.

Sobre el envío de la documentación y las papeletas para votar el colectivo denuncia que “en Francia, muchos de los envíos postales fueron devueltos al Estado español por el sistema de correos, al igual que sucedió en Ecuador, donde gran parte de la documentación electoral se perdió, nunca llegó o fue devuelta a España sin motivo. En Alemania, algunas papeletas llegaron rotas o incompletas y, en general, muchos envíos llegaron demasiado tarde”. También el hecho de que las papeletas llegasen a los electores ERTA en Lituania o Rusia cuando el plazo para votar ya había finalizado.

Marea Granate argumenta que estos problemas en la distribución de la documentación no se deben al mal funcionamiento de los sistemas postales de otros países, sino “a una Ley Electoral que no es realista, pone plazos imposibles, y cuya inflexibilidad hace que cualquier circunstancia extraordinaria sea insorteable”.

Por último, el colectivo denuncia falta de transparencia y opacidad en el proceso de escrutinio del voto CERA, que en la mayoría de las ocasiones se realiza el tercer día posterior a la jornada electoral.

El Ministerio de Asuntos Exteriores dificulta la cobertura informativa

Si bien para los ciudadanos españoles las jornadas de depósito del voto en urna transcurrieron con normalidad en los consulados, en muchos de ellos la cobertura informativa fue dificultada por indicaciones expresas enviadas por el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación a los consulados.

En lugares como Montevideo, Hamburgo o París los cónsules prohibieron la cobertura normal de las jornadas de depósito de voto en urna. Desde la Oficina de Información Diplomática se indicó a España Exterior que la prohibición de tomar fotografías se debía al cumplimiento de la Ley de Protección de Datos, sin mayores explicaciones. Se trata de un argumento totalmente falso puesto que en España se han tomado fotografías y se han grabado imágenes de las jornadas de votación en multitud de mesas electorales para ilustrar las informaciones sobre la jornada electoral. Además, existe una directiva de la Junta Electoral Central indicando a los consulados que se debe permitir la cobertura informativa de las jornadas de depósito de voto en urna y la toma de fotografías. Así lo hicieron, por ejemplo, en los consulados de Buenos Aires, La Habana o México.

UN comentario en “Marea Granate denuncia que la normativa electoral ha vuelto a diezmar la participación de los españoles del exterior

  1. Yo vivo en la provincia de Manitoba, Canada y como siempre, recibi las papeletas para votar 1 dia tarde y naturalmente, no llegaron al Consulado General de Espana en Toronto a tiempo. A si es que como me pasa siempre, mni voto quedo anulado y no fue a ningun lado. La ley deberia decir lo siguenre segun los votantes Espanoles en el extranjero: Mandar las papeletas 1 mes antes de las elecciones. De esta forma todos en el extranjero votariamos a tiempo y punto. Gracias

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