Las seis comunidades autónomas con un mayor número de retornados en 2017, último año cerrado del que se tienen datos oficiales, son, por este orden, la Comunidad de Madrid, Cataluña, Galicia, Islas Canarias, la Comunidad Valenciana y Andalucía.
La primera de ellas, la Comunidad de Madrid, registró un total de 18.400 retornados en el año 2017 lo que supone un incremento del 159,6% respecto a los 7.088 anotados en 2013. Por su parte, Cataluña incrementó el número de retornados en un 134,8% entre 2013 y 2017 al pasar de 4.231 a 9.936. El crecimiento del retorno en la Comunidad Valenciana fue todavía mayor, en concreto del 175,8% al pasar de los 2.136 de 2013 a los 5.891 en 2017.
La comunidad autónoma de Andalucía también registró un crecimiento nada despreciable en el número de retornados al pasar de los 2.622 de 2013 a los 5.282 en 2017 que supone un aumento del 101,4%.
Por su parte, dentro de este grupo de autonomías, Galicia y las Islas Canarias registraron también un considerable aumento porcentual en el número de retornados. Así, en el archipiélago ascendió en un 140,8% el pasar de 2.576 en 2013 a 6.203 en 2017. Por su parte, en Galicia el aumento fue aún mayor, del 144,8%, es decir, de los 2.675 en 2013 a los 6.549 en 2017.
Sin embargo, la comunidad autónoma en la que más ha crecido el retorno -en términos porcentuales- entre 2013 y 2017 fue La Rioja donde se pasó de recibir 82 retornados en 2013 a 240 cinco años después lo que supone un incremento del 192,7%.
Además de La Rioja, hay otras autonomías en las que se registra un fuerte incremento porcentual en los retornados, aunque el cómputo neto del número de personas que regresan no es muy alto. Este es el caso de Castilla-La Mancha, donde se pasó de 467 retornados en 2013 a 1.229 en 2017, un aumento del 163,2%, o de la Comunidad Foral de Navarra, donde se registró un aumento del 155,6% al pasar de 324 retornados en 2013 a 828 en 2017. Cifras bastante similares a las de Cantabria, donde aumentó el retorno en un 155,3%, de 246 en 2103 a 628 en 2017.
De los 63.983 españoles que retornaron a España en 2017, 43.532 lo hicieron del continente americano (39.075 de algún país de Centroamérica o América del Sur y 4.457 de América del Norte). De Europa procedieron 15.519 (12.286 de algún país de la Unión Europea y 3.233 del resto de países). De Asia retornaron 2.839 personas; de África 1.517 y de Oceanía 576.
Las provincias que registraron un mayor número de retornos fueron las de Barcelona, que sumó en 2017 un total de 8.341 personas; Santa Cruz de Tenerife, que alcanzó los 4.597; Valencia, con 3.444; A Coruña, con 2.746; Pontevedra, con 2.121; y Alicante, con 2.049. Los datos recogidos en estas tablas provienen de las estadísticas oficiales del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social que se elaboran a partir de las bajas consulares registradas. Esta gestión, que se debe efectuar en la Oficina Consular o en la Sección Consular correspondiente, es obligatoria de cara a la posterior solicitud de prestaciones que el Gobierno español o los Ejecutivos autonómicos preparan para facilitar el regreso y favorecer la integración de los españoles que tuvieron que dejar su tierra. Además, este trámite no es siempre de carácter voluntario y causas como el fallecimiento o la pérdida de la nacionalidad española obligan a la baja consular.
De todas formas, el registro consular es una fuente de conocimiento muy útil, sobre todo para apreciar tendencias, pero no aporta las cifras reales de la nueva emigración española, que en un porcentaje importante no se registra en su consulado. Las razones para no realizar este acto administrativo son diversas: la lejanía del consulado con la ciudad de residencia; la inscripción implica la baja en el Padrón en España; desconocimiento de las ventajas de estar registrado; necesidad de acreditar que trasladas tu residencia de forma permanente; normalmente el registro se realiza cuando ya han pasado unos años de emigración y la persona está más asentada.