La Virgen de los Desamparados, traída desde Valencia, volvió a recibir a sus fieles en la iglesia de las Carmelitas del Prado en Montevideo, en una celebración que tuvo la participación de la Asociación Comunidad Valenciana y que culminó con la tradicional paella en su sede social.
En marzo de 1954 un grupo de emigrantes valencianos devotos fundaban la Congregación de la Virgen de los Desamparados en la capital uruguaya, la ciudad que les acogía como a tantos otros españoles.
Un año después traían desde Valencia una imagen de la Virgen patrona de su tierra natal, que fue instalada en la iglesia de las Carmelitas, un edificio de estilo gótico en el barrio residencial del Prado.
El pasado 22 de mayo, la Virgen fue entrada en procesión por los valencianos y descendientes. La presidenta de la Asociación Comunidad Valenciana, Sandra Dotta, portaba su estandarte acompañada por las falleras de la institución y varios directivos con los pabellones de España, Valencia y Uruguay.
La iglesia de las Carmelitas recibió la celebración con gran cantidad de feligreses que veneran a la patrona valenciana y también estuvo presente la cónsul general de España, María Victoria Scala, así como el director del Museo de las Migraciones de la capital uruguaya, Luis Bergatta, quien está coordinando una actividad conjunta con la asociación para mostrar la huella de los valencianos en Uruguay.
Al culminar la celebración, los valencianos aprovecharon para tomar instantáneas junto a la imagen de la Virgen de los Desamparados, en tantos otros oraron después de dos años en los que la celebración no se pudo realizar a causa de la pandemia.
La fiesta de los socios y amigos de la Asociación que preside Sandra Dotta continuó en la sede de la calle Palmar, en el barrio del Cordón de Montevideo, donde desde temprano la chef Alicia estaba preparando la paella que tradicionalmente es la reina de los almuerzos que les convoca todos los meses.
A fines del año pasado, quien confeccionaba la misma, Mariano Martínez, retornó a tierras valencianas, por lo que ahora es Alicia la que puso fuego a las paellas y dejó a todos los asistentes totalmente satisfechos.
