Los líderes independentistas en prisión preventiva fueron trasladados a cárceles catalanas al acabar el juicio en el Tribunal Supremo. Ya habían sido trasladados a Cataluña en julio de 2018, tras concluir la instrucción, pero volvieron a cárceles madrileñas el 1 de febrero para el juicio.
Por otro lado, el Supremo rechazó la petición de Carles Puigdemont y Toni Comín de suspender el acuerdo de la Junta Electoral Central que declaró vacantes sus escaños en la Eurocámara tras no ir a Madrid a acatar la Constitución y hacerlo ante notario. Además, la Assemblea Nacional Catalana (ANC) instó a boicotear a las empresas españolas a través de un registro de compañías comprometidas con el ‘procés’.