La Consellería de Sanidade informó, el 19 de julio, que el número de casos activos de coronavirus en Galicia asciende a 11.086 (8.620 más que 14 días antes, cuando el 5 de julio se registraban 2.466, multiplicando por más de 4 los contagios), tras registrar el cuarto día consecutivo con más de 1.000 casos. El pasado 21 de junio era de 1.250, más de diez veces menos. El tope de toda la pandemia se alcanzó el 31 de enero con 22.608, teniendo en cuenta que en los primeros meses no se realizaban tantos tests como ahora. De los casos actualizados, 1.898 son del área de A Coruña (tenía 627), 1.023 de la de Lugo (264 hace 2 semanas), 2.014 de la de Ourense (311), 1.879 de la de Pontevedra (510), 2.490 del área de Vigo (429), 1.357 de la de Santiago (237), y 425 de la de Ferrol (88).
Todo ello tras 25 días consecutivos de subidas provocadas por los contagios entre los jóvenes a raíz del brote de Mallorca y los festejos de San Juan con el verano recién iniciado, el fin de las clases y el anuncio de la relajación en el uso de mascarillas.
La incidencia acumulada en Galicia en los últimos 14 días supera los 320 casos por cada 100.000 habitantes, frente a los 90 de hace 2 semanas, lejos de la media nacional de 537 casos (152 hace 2 semanas), aunque en riesgo extremo al haber superado la cifra de 250. Y muy por encima de los 13 casos por cada 100.000 habitantes de la Comunidad del 10 de agosto. El número de pruebas PCR realizadas es de 2.468.140; 86.119 más en 2 semanas. Los brotes entre jóvenes han llevado a una explosión de la transmisión de tal magnitud que la tasa de positividad está en más del 13%, el récord de la pandemia sin contar la primera ola en la que se hacían muchas menos pruebas. Muy por encima del 5%, que marca la OMS para dar por controlada la expansión del virus.
Del total de pacientes positivos, 21 permanecen en UCI frente a los 11 de hace 2 semanas, 119 están en unidades de hospitalización (50 hace 14 días) y 10.946 en el domicilio (8.541 más). La tasa de hospitalización es del 1,26% (2,47 hace 2 semanas), con 140 pacientes y 21 en Cuidados Intensivos, frente a los 61 hospitalizados y 11 en UCI del 5 de julio. Mientras que los centros de salud dicen estar al límite, por el elevado número de casos leves que atienden.
5 fallecidos en 14 días
Por ahora, en Galicia hay un total de 128.174 personas curadas (2.182 más en estas dos últimas semanas), registrándose 2.442 fallecimientos, frente a los 2.437 que se notificaban el 5 de julio. Por tanto, hay que lamentar 5 muertes en 14 días. Durante el pasado mes de junio perdieron la vida 16 personas en Galicia a causa del Covid-19, mientras que en mayo fueron 29, en abril 48, en marzo 90 y en febrero 423.
En cuanto a los centros residenciales de servicios sociales, volvieron los casos de covid con brotes en residencias de Betanzos, Valverde de Allariz y Campolongo y se registró un fallecido, la primera víctima desde el 23 de marzo, cuando durante la pandemia se contabilizaron 355 personas fallecidas en residencias y 435 en hospitales y residencias integradas.
Por último, el número de dosis de vacuna contra la Covid-19 administradas en la Comunidad es de 3.281.726, a 19 de julio, 398.230 más en las últimas dos semanas, a una media de cerca de 28.500 al día. Alrededor de un 75% de los gallegos susceptibles de recibir la vacuna contra el covid (1,298 millones de gallegos) cuenta con al menos un pinchazo, tras alcanzar las 1.816.471 personas vacunadas. Además, el 65,56% está inmunizado contra el virus, 1.609.390 personas.
Un nuevo modelo para adoptar medidas en los ayuntamientos según la presión asistencial de los hospitales
El conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, informó el pasado 14 de julio en rueda de prensa, de la decisión de limitar las reuniones en la hostelería a un máximo de 6 personas en el interior y, a 10 en espacios exteriores y terrazas, en todos los niveles, salvo en el nivel alto, en el que sigue la prohibición de abrir en el interior de los locales. El titular de la cartera sanitaria de la Xunta apuntó que esta medida tendrá carácter de recomendación en los restantes ámbitos sociales, con el ánimo de atajar la expansión del virus.
García Comesaña trasladó su preocupación por la importante subida de nuevos casos detectados en las últimas fechas, donde se destaca la presencia de un amplio número de personas jóvenes. De este modo, y ante el cambio de perfil de las personas contagiadas por la covid-19, el conselleiro avanzó un nuevo modelo para adoptar restricciones en los ayuntamientos, donde primará la presión asistencial de los hospitales gallegos. Así, adelantó que se trata de un modelo “dinámico, variable y donde tendrá mucha importancia la presión asistencial de cada área”, detallando que apostaron por ajustar los criterios epidemiológicos a la nueva realidad, en la que hay un número mayor de población vacunada, muchos casos activos entre población más joven, y también un nuevo patrón en el perfil de las personas que ingresan por la covid.
En esta misma línea, el responsable de Sanidade informó que el deber de presentar una PCR o test de antígeno negativo -realizado en las últimas 72 horas- o el certificado de vacunación completa, se extiende a los locales de ocio nocturno que se ubican en ayuntamientos de nivel medio-bajo.
En cuanto a la realización de pruebas diagnósticas, la responsable de Saúde Pública explicó que esta actividad continúa intensificándose y que, durante la semana anterior se citaron para los cribados a 41.000 personas, acudiendo el 41,5% de las convocadas, y detectándose un total de 323 casos positivos. En este sentido, invitó a la población más joven a acudir a los cribados que se realizarían esa semana, en los que se convocó a más de 26.000 personas.
En cuanto a las restricciones por ayuntamientos, el comité clínico que asesora a la Xunta de Galicia en la gestión de la pandemia provocada por la covid-19, acordó, en su reunión del día 13, el establecimiento del nivel alto de restricciones para los ayuntamientos de Ourense, Barbadás, A Illa de Arousa, Cambados, Vilagarcía de Arousa, Vilanova de Arousa y O Barco de Valdeorras. Además, las medidas del nivel medio son de obligado cumplimiento en los ayuntamientos de Culleredo, Porto do Son, O Carballiño, Ribadavia, Sarria, Sanxenxo, Poio, Boiro, A Pobra do Caramiñal, Marín, Pontevedra, Redondela, Vigo, Caldas de Reis y Salceda de Caselas. Los restantes ayuntamientos gallegos permanecen en el nivel medio-bajo.
Además, la Xunta cerró los espacios donde habitualmente se celebran botellones -parques, playas, plazas, etc-, entre las 0 y las 6 horas y recordó que este tipo de reuniones están prohibidas, solicitando la colaboración de la gente joven, y apelando a su responsabilidad individual.
Cribados entre la población entre los 19 y los 35 años
Entre las decisiones acordadas por el comité clínico, el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, destacó la intensificación en la realización de cribados entre la población con edades comprendidas entre los 19 y los 35 años. Así, el departamento sanitario preparó una nueva modalidad voluntaria de cribado, mediante la que se pueda solicitar la realización de una prueba PCR, sin necesidad de tener una cita previa. El responsable de Sanidade lamentó que “el nivel de adherencia a los cribados en esta franja de edad es francamente bajo”, invitando a los jóvenes gallegos a que acudan a sus citas, para conseguir atajar la expansión del virus.
Por otro lado, la Xunta estudia con la hostelería y con el ocio nocturno medidas que garanticen su apertura y la seguridad de sus clientes ante la nueva situación epidemiológica en Galicia, ya que desde la Administración se trata de evitar el cierre de uno de los sectores más perjudicados por la pandemia. En el marco de los encuentros habituales que la Xunta mantiene con los colectivos más castigados por la crisis de la covid, el vicepresidente primero, Alfonso Rueda, y el conselleiro de Sanidade mantuvieron reuniones por videoconferencia con representantes del ocio nocturno y de la hostelería para analizar el impacto de las nuevas medidas acordadas por el comité clínico, tras las nuevas restricciones en las reuniones de personas que afectan a la hostelería -con un máximo de seis en el interior de los locales y diez en el exterior-, y el deber, para acudir la locales de ocio nocturno, de disponer de una PCR o test de antígeno negativo, realizados en las últimas 72 horas, o un certificado de vacunación.
