Al igual que sucede en cada elección desde la instauración del sistema de voto rogado, la primera jornada de votación para los comicios andaluces del domingo 19 de junio se vivió con mucha tranquilidad y escasa participación en el Consulado General de España en Buenos Aires.
El único momento en el que se formó una pequeña cola fue minutos antes de la apertura del horario habilitado para votar de manera presencial en la única urna dispuesta en la sede consular, a las 10 de la mañana (tanto el miércoles 15 como el jueves 16 los horarios habilitados son de 10 a 14 y de 15 a 19, mientras que el viernes 17 el horario establecido se reduce de 10 a 15 horas).
Una de las primeras personas en depositar su voto fue Juan Ramón Garnica Ervás, un andaluz que nació en Granada hace 75 años y que emigró a Argentina junto a su familia cuando era un pequeño niño.
Juan Ramón siempre vota de manera presencial por una muy simple razón: vive a sólo dos cuadras del Consulado. Si bien explica que no le significó ninguna dificultad tramitar el ruego del voto, comenta que la próxima eliminación de esta imposición seguramente facilitará mucho la participación de los ciudadanos españoles que residen en el exterior en los procesos electorales: “Va a ser mucho más cómodo. Además, mucha gente se quedaba sin poder votar porque le llegaban tarde las papeletas”.
A pesar de que su apellido no parezca indicarlo, Elizabeth Gutnik tiene sangre andaluza en sus venas, transmitida por sus abuelos por parte materna. “No me pierdo ninguna elección y siempre vengo a votar de manera presencial, porque cuando entro al Consulado siento que estoy en España”, explica con emoción.

Elizabeth vivió 15 años en España, en donde se casó con un andaluz, y no descarta volver a radicarse allí en el futuro. Al igual que Juan Ramón, ella siente que la eliminación de la imposición de tener que rogar el voto va a facilitar la participación electoral de la ciudadanía española en el exterior.
Por su parte, Roxana, quien prefirió no dar su apellido, también coincide en que la próxima reforma electoral, en caso de concretarse como es esperada, hará más simple todo el proceso para los electores. “Yo vengo a votar al Consulado porque por correo las papeletas llegan siempre tarde. Además una vez tenía que enviar documentación por fax, pero la verdad es que ya nadie usa fax y cuesta mucho conseguir uno”, subraya.
Nieta de andaluces originarios de Almería, Roxana, al igual que Elizabeth, no descarta tampoco radicarse en España en un futuro próximo, tal vez una manera de estar más cerca de uno de sus hijos, que consiguió trabajo en Francia. “Siempre estoy muy al tanto de todo lo que sucede en España, y en especial en Andalucía. Cada vez que hay una elección hablo con un primo que vive allí para que me cuenten cómo están las cosas allí y así yo decido a quien votar”, concluye.
En la demarcación consular de Buenos Aires hay un total de 20.447 andaluces censados. De ellos, solamente 521 rogaron el voto, el 2,5%, y tras la primera jornada desarrollada el 15 de junio se contabilizaron 165 sufragios recibidos por correo y 42 depositados presencialmente en la urna, es decir, un total de 207 papeletas que suponen el 1% del total de censados y casi el 40% de quienes rogaron el voto.
los que pusieron el voto rogado,se quieren atribuir el mérito de su futura eliminación, son los mismos que declaran a los retornados como doble pagadores porque si, los mismos que no reconocen la discapacidad traída del exterior y a esos no puedo votar por mas que me duela en el corazón pero mi voto es mio y se queda conmigo y eso deberia ser para todos los que somos emigrantes o retornados el BNG es el ùnico grupo que nos apoya de momento