El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, informó de que el Consello dio luz verde el pasado 18 de octubre al Proyecto de ley de Presupuestos de la Comunidad Autónoma para 2024, “los más altos de la historia de Galicia con 13.257 millones de euros”. “Galicia es una de las primeras comunidades en aprobar sus presupuestos para 2024 y, un año más, lo hacemos en tiempo y forma”, subrayó.
Rueda resaltó que el Gobierno gallego sigue “su hoja de ruta de estabilidad”. Por eso, aprobó unos presupuestos que crecen un 5% respecto a 2023 y que tienen como prioridad “el crecimiento estable, la creación de empleo, el refuerzo de los servicios públicos, el apoyo a familias y empresas y el impulso decidido de proyectos transformadores”.
Tal y como explicó, estos presupuestos consolidan todas las rebajas de impuestos en vigor e incluyen nuevos incentivos fiscales; refuerzan el gasto social y las inversiones y todo eso “sin recurrir al endeudamiento por primera vez en 16 años”. “Son unas cuentas prudentes y realistas”, destacó.
Estabilidad, personas y futuro
Por su parte, el conselleiro de Facenda e Administración Pública, Miguel Corgos, destacó que los recursos presupuestarios de 2024 están orientados a tres objetivos principales: “invertir en estabilidad, invertir en las personas, e invertir en el futuro”.
Así, explicó que los presupuestos del año que viene invierten en estabilidad con unas finanzas solventes, que no generan deuda y que consolidan los beneficios fiscales a los gallegos para ser una de las comunidades con un mejor tratamiento a las rentas medias y bajas. Corgos destacó que invertir en estabilidad “permite tener contenidos los gastos en intereses con un ahorro de 490 millones de euros en la legislatura”; ser la comunidad autónoma que menos incrementó la deuda desde el año 2008; o estar entre las comunidades con menor necesidad de esfuerzo para la consolidación fiscal.
En segundo lugar, los presupuestos permitirán invertir en las personas para reforzar los servicios públicos autonómicos y reforzar también el apoyo a los gallegos que más lo precisan; apuestan por la modernización del servicio de salud; la inclusión de nuevas prestaciones; el refuerzo de los servicios sociales, en especial la atención a los mayores; refuerzan el apoyo a las familias y las políticas de vivienda; e impulsan medidas de integración en el mercado de trabajo y lucha contra la exclusión. En este marco, se destinarán 255 millones de euros a atención hospitalaria; 61 millones de euros para infraestructuras y equipaciones en atención primaria; 27,5 millones de euros para la construcción de viviendas en alquiler social; 25 millones de euros para el programa de atención al alumnado con necesidades específicas de apoyo; 16,2 millones de euros para el bono deportivo; 14,8 millones de euros para el centro de protonterapia; 14,5 millones de euros para la inclusión social de colectivos vulnerables; 7,7 millones de euros para redimensionar la oferta de formación profesional; el bono cuidado universal para personas con dependencia atendidas en su domicilio de 5.000 euros al año; o el complemento de 1.200 euros para las personas que reciban una ayuda para residencias privadas.
Y, en tercer lugar, son unas cuentas que invierten en el futuro, que sentarán las bases del crecimiento y del empleo futuros, fomentando el desarrollo de los proyectos transformadores que Galicia está impulsando para la transición digital, ecológica y energética, aprovechando los fondos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia. En este bloque se incluyen 14,3 millones de euros para el Centro de Ciberseguridad de Galicia y gestión inteligente; 14 millones de euros para emprendimiento y competitividad; 9,1 millones de euros para la descarbonización de las pymes e incentivos a las energías renovables; 8 millones de euros para el polo de tecnologías cuánticas; 5 millones de euros para el Centro de formación avanzada en transición digital y verde en la Cidade das TIC; 12 millones de euros para la promoción de la Ternera Gallega; o 11 millones de euros para inversiones en tecnologías forestales.
El mayor refuerzo del gasto social y de las inversiones
Tal y como explicó Rueda, los Presupuestos de 2024 refuerzan un año más tanto el gasto social tradicional (sanidad, educación y políticas sociales) como el gasto para el fomento del empleo. Así, estas cuentas incluyen el mayor gasto social de la historia de la Comunidad que asciende a 9.774 millones de euros (1.234 millones más que hace tres años) para sanidad, educación, políticas sociales y empleo.
Rueda destacó que “por primera vez se destinarán más de 5.000 millones de euros a la sanidad pública”. Por su parte, Corgos añadió que “tanto la enseñanza como las políticas sociales tendrán más recursos que nunca” con 2.858 millones a la educación pública, 1.303 la políticas sociales. A ellos hay que añadir 448 millones para el empleo.
Por otra parte, el proyecto de ley aprobado ese día por el Consello da Xunta incluye también un refuerzo de la inversión productiva, de forma que el próximo ejercicio, la Comunidad dispondrá de 2.838 millones de euros para inversiones, un 2,4% más que en el 2023. Si se tiene en cuenta el esfuerzo inversor acumulado en esta legislatura, en los últimos cuatro años la cifra supera los 10.500 millones de euros.
Política fiscal y nuevas rebajas de impuestos
En materia de política fiscal, la Xunta cuenta con un modelo fiscal propio y previsible, que incluye rebajas tributarias que priorizan cada año a las rentas medias y bajas y con colectivos prioritarios: los jóvenes menores de 36 años; las familias numerosas; las personas con discapacidad o las víctimas de violencia de género.
Los presupuestos del año que viene consolidarán todas las rebajas fiscales puestas en marcha hasta el momento. En este marco, hay que recordar que la Xunta ya aprobó en materia de IRPF cuatro rebajas del tramo autonómico desde el año 2014 gracias a lo que Galicia se sitúa hoy como la tercera comunidad autónoma con mejor tratamiento fiscal para rentas de hasta 20.000 euros. Es además, la comunidad con mejor tratamiento fiscal en el Impuesto de Sucesiones, pues el 99,9% de las herencias de un familiar directo no tributan; y fue pionera en España en implantar un programa: ‘Impuestos 0 en el Rural’.
Como novedad, en la declaración del IRPF del año 2024 las familias con dos hijos ya podrán deducir 250 euros, deducción que hasta ahora tenían las familias numerosas y que ahora se duplica, hasta los 500 euros. Además, por cada hijo a mayores, a partir de tres, esta deducción, se incrementará en otros 250 euros.
En cuanto al Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP), el próximo año se rebaja un punto el tipo general para la compra de inmuebles usados (pasa del 9% al 8%), que se suma a otro punto que ya se había bajado en el año 2022; se rebaja más de la mitad el ITP para la compra de vehículos usados (del 8 al 3%), y se elimina el impuesto para las compras de vehículos calificados de bajas ‘emisiones’.
En definitiva, tal y como destacó Corgos son unas cuentas con más recursos que nunca, que invierten en estabilidad con unas finanzas solventes y que consolidan los beneficios fiscales para los gallegos; que invierten en las personas con el refuerzo de los servicios públicos y el apoyo a los que más lo precisan; y que invierten en el futuro con inversiones productivas en transición verde y digital para sentar las bases del crecimiento y del empleo futuros.
Apuesta por el reequilibrio territorial
El 18 de octubre, el Parlamento de Galicia había dado luz verde al techo de gasto para 2024, que asciende a 13.257 millones de euros, trámite mecesario para el proceso legislativo de las Cuentas. El Proyecto de ley de Presupuestos para 2024 fue entregado el 20 de octubre al presidente del Parlamento, Miguel Santalices, por el conselleiro de Facenda e Administración Pública, junto al Proyecto de ley de Medidas Fiscales y Administrativas.
En la rueda de prensa posterior a la puesta a disposición del texto a la Cámara gallega para su tramitación, que se prevé finalice el 20 de diciembre, Miguel Corgos destacó que la Xunta ampliará en 2024 el volumen de beneficios fiscales hasta los 686 millones de euros, casi 100 millones más que este año, al tiempo que seguirá apostando por el reequilibrio territorial con un mayor gasto per cápita en las provincias orientales: Lugo, donde la Xunta destinará 5.568 euros per cápita, y Ourense, con 5.409 euros por habitante. Por el contrario, en las provincias atlánticas A Coruña recibirá 4.157 euros per cápita y Pontevedra 4.031 euros por habitante. Respeto al volumen de gasto, las provincias que reciben mayor volumen de gasto son A Coruña y Pontevedra, con 4.664 y 3.803 millones de euros, respectivamente, mientras que Lugo recibirá 1.804 millones y Ourense, 1.644 millones de euros.