La Unión Europea abre sus fronteras a 15 países y mantiene el veto a Estados Unidos, Rusia y casi toda Iberoamérica

Uruguay es el único latinoamericano incluido en la lista / Los ciudadanos y residentes europeos, en todo caso, siempre podrán volver desde cualquier país, incluidos los vetados

La Unión Europea abre sus fronteras exteriores hoy 1 de julio a una serie de países que considera seguros. Se trata de Australia, Argelia, Canadá, China, Corea del Sur, Georgia, Japón, Marruecos, Montenegro, Nueva Zelanda, Serbia, Tailandia, Túnez, Uruguay y Ruanda. No obstante, en el caso de países como China -que tienen prohibida la entrada de extranjeros- pueden finalmente quedar fuera si se aplica el principio de reciprocidad: solo se abrirán las fronteras al país asiático cuando Pekín abra las suyas a los europeos.

Se mantiene el veto a más de 150 países, entre ellos Estados Unidos, Brasil, México, Argentina, Rusia o India. Los ciudadanos y residentes europeos, en todo caso, siempre podrán volver desde cualquier país, incluidos los vetados. La lista se revisará cada dos semanas y podrá incluir nuevos países o excluir a otros que ahora formen parte de ella.

La UE cerró sus fronteras exteriores el 16 de marzo por 30 días para contener la expansión de la pandemia, una medida que se ha prolongado en varias ocasiones.

Las competencias en el control de las fronteras están en manos de los Gobiernos nacionales, pero la UE quiere coordinar la reapertura con el exterior para evitar el descontrol que se dio al inicio de la pandemia, cuando cada Estado cerró unilateralmente sus puertas.

Con el desconfinamiento, la Comisión Europea recomendó a los Estados abrir sus fronteras con otros países comunitarios a partir del 15 de junio, pero se teme que si cada uno autoriza las llegadas del exterior de forma individual, acaben reintroduciéndose controles internos en el espacio de libre circulación Schengen para prevenir la propagación del Covid-19.

La UE ha conseguido aplanar la curva del coronavirus y los Veintisiete no quieren que los viajes desde terceros países pongan en peligro esta tendencia.

Al mismo tiempo, la llegada de turistas extracomunitarios es importante para los países que más dependen del turismo: la UE recibió 500 millones de visitantes de terceros países (la mayoría con destino al sur del continente) que gastaron 342.000 millones de euros en 2016, lo que la convierte en el primer destino turístico global, según datos de la Organización Mundial del Turismo.

Archivado en

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.