El Boletín Oficial del Principado de Asturias publicó el día 10 de mayo la Ley de Impulso Demográfico que recoge varias iniciativas a favor del retorno.
En concreto, en el Capítulo 5 del Título IV se establece que la Administración asturiana “impulsará el Plan Retorna Asturias para ofrecer un acompañamiento integral a los asturianos y sus descendientes que hayan retornado o tengan proyecto de retorno a la comunidad autónoma”. Sobre este punto, la Disposición adicional octava de la ley indica que dicho plan “deberá ser desarrollado en el plazo de seis meses” desde la entrada en vigor de la norma.
Para ello, “se creará una Oficina del Retorno, en la que ofrecer asesoramiento social, laboral, económico y administrativo, que efectuará una labor de seguimiento de la persona que retorna y de su familia, a fin de facilitar su inclusión social y laboral, con particular atención a las situaciones de especial vulnerabilidad”. Asimismo, este plan recogerá “medidas específicas para la juventud, que garanticen a estas personas poder regresar a su tierra de origen con el fin de desarrollar las capacidades y los conocimientos adquiridos”.
También se indica que el Gobierno asturiano “impulsará la participación y el arraigo de las personas asturianas residentes en el exterior en la vida social y cultural de Asturias a través de los programas vinculados a la identidad e historia de la comunidad autónoma, así como los intercambios en el ámbito educativo o económico que se promuevan”.
Respecto a los centros asturianos en el exterior se señala que el Ejecutivo autonómico colaborará con ellos “para realizar campañas de promoción, divulgación y facilitación del retorno de asturianos en el extranjero”.
Otras medidas serán la puesta en marcha de “una plataforma integrada de información tanto presencial como online/multicanal para el asesoramiento de las personas que quieran retornar”, así como el establecimiento de ayudas “que faciliten el traslado y asentamiento de los asturianos retornados”.
La ley, que tiene un total de 81 artículos, siete títulos, siete disposiciones adicionales, una derogatoria y cuatro finales, recoge toda una serie de medidas cuyo objetivo es “mejorar la tendencia demográfica de Asturias” y se plantea como una herramienta legislativa “que trascienda las limitaciones propias de la temporalidad de las legislaturas”. Nace con el objetivo, según se indica en su preámbulo, “de estar a la altura de las circunstancias del medio y largo plazo que caracterizan la propia naturaleza de la transición y cambio demográfico al que nos enfrentamos”.
De nada va a servir esta ley hasta que los emigrantes retornados no tengamos igualdad de oportunidades y condiciones laborables que el resto de los Asturianos. Basta de engaños, lo que buscan es mano de obra barata en condiciones de explotación a modo de jornaleros con empleos precarios que ninguno de los más de 50.000 desempleados en esta región los aceptan. Homologuen nuestros títulos que llevan años de atasco en el ministerio de universidades sin solución a corto plazo, reconozcan nuestra experiencia laboral en el exterior a través de los consulados, no más trámites burocráticos y hasta ridículos para obtener la residencia de nuestros cónyuges o familiares no españoles, tener acceso a las ayudas como desempleados al igual como incentivos reales para fijar nuestra residencia y una jubilación justa como el resto de los Asturianos. No más discriminación y abusos institucionales…