Aunque nacida en A Coruña, Kathleen McGinley Rodríguez-Sabio, de madre española y padre australiano, acaba de regresar a su ciudad natal después de 20 años viviendo en aquel país. Kathleen decidió retornar porque buscaba estar cerca de su familia en la ciudad. Tanto ella como su marido aprecian la calidad de vida que hay en A Coruña y, además, les encanta vivir en Europa y poder desplazarse fácilmente a otros países, algo que en Australia es bastante más complicado. “Tenemos familia aquí, podemos abrir aquí un negocio, tenemos Europa al lado, y bueno, aquí estamos”, afirma sonriente.
Kathleen siempre tuvo negocios en Australia relacionados con la decoración y ella, su marido y su hijo pequeño decidieron establecerse en A Coruña y hacer aquí lo que hacían allí. Así nació ‘Wombat’, una tienda de muebles y decoración situada en la calle Enrique Dequidt en la que se respira el original estilo de las antípodas.
“Allí, como es un país tan joven, les gustan mucho las cosas antiguas o ‘vintage’ pero modernizadas. Entonces los muebles se arreglan, se pintan, se ponen de colores vivos. Además, la gente en Australia es muy divertida, alegre, atrevida y les gusta que su casa refleje esa personalidad”.
Tras veinte años en el país, el regreso supuso toda una aventura en la que Kathleen y su familia contaron con la ayuda de la Secretaría Xeral da Emigración a través del programa de ayudas al retorno emprendedor. Por este motivo, el titular de dicho departamento, Antonio Rodríguez Miranda, acudió a la apertura de la tienda el miércoles 29 de enero.
Miranda destacó que, con este programa se trata de “ayudar a todos aquellos gallegos que están por el mundo para que puedan venir a Galicia y emprendan”. “Para nosotros -destaca el responsable de Emigración- es tremendamente importante poder aprovechar ese caudal de conocimiento, de experiencia, que ellos fueron atesorando en cada uno de esos países en los que vivieron y que eso podamos incorporarlo a la sociedad gallega”. Al mismo tiempo, además de esa ventaja competitiva, también es “una manera de atraer población, a nuestra gente, nuestra población, porque tenemos un problema demográfico. Es una manera de solucionarlo, por lo menos a más corto o medio plazo”.
Asimismo, recalcó el “punto de innovación” que aportan los retornados a la hora de poner en marcha un negocio. “Ahora mismo la ciudad de A Coruña va a tener una tienda que hasta ahora no tuvo, y que creo que nunca en la historia tuvo, que es una tienda de decoración relacionada con Australia”, destacó.
Nueva convocatoria
El secretario da Emigración adelantó que en los primeros días del mes de febrero se convocarán las ayudas al retorno emprendedor correspondientes a 2020, cuya cuantía total alcanza los 400.000 euros. Se trata de aportaciones a fondo perdido para sufragar los gastos iniciales de puesta en marcha de una iniciativa emprendedora dotadas de una cantidad de 5.000 euros que puede incrementarse en otros 2.000 euros cuando el emprendimiento se realiza en un municipio rural y de otros 1.000 euros más cuando es una mujer la solicitante, por lo que las ayudas pueden llegar hasta los 8.000 euros.
“El programa de la Xunta nos ha ayudado bastante porque siempre viene bien que te echen una mano cuando empiezas una iniciativa nueva” explica Kathleen que también indica que la tramitación fue bastante sencilla, la realizaron ‘on line’, y todo se solventó positivamente en un plazo no muy largo.
Rodríguez Miranda explicó que, desde la puesta en marcha de este programa de apoyo al retorno emprendedor, casi 190 proyectos de gallegos retornados pusieron en marcha nuevos negocios con el apoyo de la Xunta. Y sólo en el último año, A Coruña fue la segunda provincia en la que más negocios se establecieron repartidos en 8 municipios (Santiago de Compostela, Arteixo, A Coruña , Laxe, Negreira, Noia, Oleiros y Pontedeume) y la edad media de estos emprendedores ronda los 44 años.
Destacó también que, según los últimos datos oficiales disponibles que son los correspondientes a 2018, la provincia coruñesa acogió a más de 3.200 gallegos retornados.
