Las llamas asediaron territorios de media España, hasta ocho comunidades autónomas, la segunda semana de junio por la ola de calor y las tormentas que se produjeron obligando a desalojar a miles de personas. Especialmente en zonas de Navarra, Lleida, Castellón y Toledo. Pero, sobre todo, la Sierra de la Culebra en Zamora, donde se registró el mayor incendio desde 2012, con más de 25.000 hectáreas afectadas.