García-Page consigue una inesperada mayoría absoluta en Castilla-La Mancha

La derecha se impone en Navarra, pero el PSN tendrá la llave de gobierno / El PP pierde La Rioja, Revilla resiste en Cantabria y en Aragón gana Lambán, pero decidirá Cs

El socialista Emiliano García-Page volverá a presidir Castilla-La Mancha durante los próximos cuatro años al conseguir el PSOE 19 escaños, dos por encima de la mayoría absoluta. García-Page podrá gobernar en solitario, una circunstancia que no contemplaban ni las encuestas más favorables para los socialistas.

La victoria del PSOE, que ha sumado cuatro escaños más que en 2015, contrasta con el hundimiento del Partido Popular de Francisco Núñez que, con 10 escaños, pierde seis respecto a los últimos comicios autonómicos.

Ciudadanos irrumpe en las Cortes regionales con cuatro escaños y Unidas Podemos no logra ningún diputado. En la legislatura anterior había sido clave con sus dos escaños para que García-Page pudiera gobernar.

En Aragón, la debacle electoral de Podemos-Equo desterró cualquier posibilidad de reeditar la alianza que hace cuatro años llevó a la presidencia del Gobierno al socialista Javier Lambán: los morados bajaron de 16 a cinco diputados tras perder 82.000 de los 135.000 sufragios de 2015, lo que neutraliza las mejoras de PSOE y de Cha, que ganaron seis y uno para subir a 24 y a tres, respectivamente, mientras IU mantenía su escaño.

Los resultados dejan las Cortes de Aragón más fragmentadas de las cuatro décadas de comunidad autónoma, con ocho grupos parlamentarios. Ese cuadro de fragmentación abre un escenario de posibles acuerdos por el centro y por la derecha en los que Ciudadanos aparece como la formación clave. 

Con todo, hay otros dos itinerarios que llevarían a Lambán a mantenerse en la presidencia. Uno, la abstención del Par en una segunda votación en la que el presidente mantuviera el apoyo de Podemos, Cha e IU sin formar una coalición; el otro, un hipotético acuerdo PSOE-Cha-Par requeriría, en cualquier caso, el voto favorable de Podemos-Equo y de IU o, al menos, el voto en blanco del segundo, y nunca saldría adelante en la primera ronda.

En Navarra, la coalición formada por UPN, PP y Ciudadanos (Navarra Suma) gana las elecciones al lograr 20 escaños, mientras que el cuatripartito que llevó a Uxue Barkos (Geroa Bai) a la Presidencia ha perdido la mayoría absoluta y no podrá revalidar el Gobierno. El cuatripartito retrocede de 26 a 19 escaños. Geroa Bai conserva sus nueve escaños de 2015, EH Bildu pierde uno (siete) y Podemos e Izquierda-Ezkerra retroceden más aún. La formación morada cae de siete a dos y la coalición de IUN y Batzarre baja de dos a uno.  Pero las opciones del candidato de Navarra Suma, Javier Esparza, por ser presidente del Gobierno pasarían por un entendimiento con el PSN, que tendría que abstenerse en la votación de investidura. Pero la candidata socialista, María Chivita, puede intentar ser elegida presidenta con los votos de Geroa Bai, I-E y Podemos y la abstención de EH Bildu. La presión del PNV a Pedro Sánchez para que el PSN no haga presidente a Esparza puede ser fundamental.

En La Rioja, después de 24 años de Gobierno ininterrumpido, el PP ha cedido el dominio a los socialistas, que bajo el liderazgo de la enóloga Concha Andreu han ganado las elecciones. Han pasado de 10 escaños a 15, suficientes para alcanzar la mayoría absoluta si suma los dos diputados obtenidos por Unidas Podemos. El PP pierde tres asientos respecto a las elecciones de 2015 (pasa de 15 a 12), mientras que Ciudadanos conserva los cuatro diputados que tenía en la Cámara riojana. Tanto el Partido Riojano como Vox quedan fuera del Parlamento regional.

El PP ha gobernado cómodamente la comunidad durante las últimas seis legislaturas. Tras las elecciones de 2015 no consiguió mayoría absoluta, pero mantuvo el poder gracias al acuerdo con Ciudadanos, que exigió la renuncia del candidato popular, Pedro Sanz.

En Cantabria, el Partido Regionalista de Cantabria (PRC) gana por primera vez las elecciones autonómicas y Miguel Ángel Revilla tendrá todo a favor para ser reelegido como presidente y cumplir su cuarta legislatura. El PRC sube de 12 a 14 escaños y el Partido Popular cae a la segunda posición bajando de 13 a 9 diputados. El PRC suma mayoría absoluta (21 diputados) con su actual socio, el PSOE, que sube de 5 a 7 diputados. Vox entra en el Parlamento de Cantabria con dos diputados y Podemos, que tenía tres escaños, se queda fuera.

Ceuta y Melilla

En Ceuta, el PP de Juan Jesús Vivas revalida su victoria de hace cuatro años, pero la fuerte irrupción de Vox, con seis diputados, le obliga a negociar para mantener la mayoría absoluta. El PSOE obtiene siete diputados. Su subida y la irrupción de Vox provocan la caída de las demás fuerzas: Cs desaparece y los partidos locales bajan.

En Melilla, el PP de Juan José Imbroda empeora los resultados de hace 4 años. Sus 10 diputados no le bastan. Necesita un pacto con Vox, que consigue 2 escaños, y Cs, que obtiene 1. Coalición por Melilla logra 8 escaños y el PSOE pasa de tres a cuatro.

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *