El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, presentó el pasado 15 de septiembre al Rey Felipe VI un nuevo Gobierno gallego centrado en paliar los efectos de la pandemia, con un componente social y económico muy importante y en el que la sanidad seguirá siendo una de las prioridades de esta legislatura.
Tras la recepción en el Palacio de la Zarzuela, después de ser investido la pasada semana presidente de la Xunta, Feijóo aseveró que los gallegos optaron el 12 de julio por la moderación y la estabilidad de una forma determinante y muy clara; y aprovechó el encuentro para evaluar la situación de la pandemia en la Comunidad.
Sobre este punto, el responsable del Ejecutivo gallego valoró la noticia de que el laboratorio americano Novavax decidiera que un laboratorio gallego de la provincia de Pontevedra participe en la fabricación de la vacuna para Europa. “Una decisión que refleja la apuesta por la profesionalidad y el rigor de cómo trabajamos en Galicia”, aseveró.
Feijóo aprovechó el encuentro para, nuevamente, poner en valor el trabajo del comité clínico del Servizo Galego de Saúde, formado por 35 profesionales que, según afirmó son “la clave del rigor” con el que Galicia está intentando gestionar la pandemia: “Lo fueron desde el 27 de febrero, fecha en la que constituimos la comisión interdepartamental de la Covid en el Gobierno; lo fueron desde el 1 de marzo, cuando empezamos a comprar respiradores y evitamos el colapso de las UCI; y siguen siéndolo porque todos los miércoles nos reunimos para tomar decisiones para los próximos siete días”, precisó.
Por último, el presidente de la Xunta y el Rey abordaron también otros asuntos de gran interés para Galicia como el problema de Alcoa y As Pontes; los proyectos tractores que la Comunidad presentará al Fondo europeo de reconstrucción; y el Xacobeo 2021. Al respecto, y como embajador vitalicio del Camino de Santiago, Feijóo pidió la ayuda de Felipe VI para ampliar esta celebración hasta julio de 2022.
Una reunión de récord
La audiencia mantenida entre el Rey y el presidente de la Xunta se prolongó durante casi tres horas, una duración mucho más larga de lo habitual en este tipo de encuentros entre el monarca con los dirigentes políticos y autonómicos. De hecho, cronistas especializados en la Casa Real no recuerdan un encuentro tan prolongado de Felipe VI desde que accedió al trono.
A su término, Feijóo subrayó que desde “el cariño y la admiración” que tiene por el Rey Felipe y por su padre, la Corona “es una apuesta segura para una España democrática”. “Que mejor que una monarquía constitucional para los momentos de dificultad y zozobra en la que se mueve en estos momentos el país”, añadió. Según el presidente de la Xunta, “las instituciones que funcionan han de preservarse y potenciar” y opinó, que en la actualidad, “quizá más que nunca lo que une a los demócratas en España es una monarquía constitucional”.
Por ello, remarcó que la “lealtad” hacia la Corona está “garantizada” desde la Xunta los próximos cuatro años, como lo estuvo en sus tres mandatos anteriores. “Galicia cree profundamente en el autogobierno, un autogobierno constitucional y una comunidad previsible que ha hecho sus deberes, que no ha creado problemas al conjunto de la nación. Los gallegos sabemos muy bien dónde estamos. Somos españoles porque somos gallegos”, enfatizó.
Calificó de “muy leal y sincera” la conversación con el Rey. “Me ha gustado tenerla con él. Ha sido un despacho largo, sincero y constructivo, y para mí todo un honor”, resaltó Feijóo, quien aseguró que si Juan Carlos I decidiera regresar a España tras su estancia en el extranjero, Galicia estaría “encantada de recibirlo”. “Es un gallego ilustre que siempre que quiera volver a Galicia, estaremos encantados de recibirlo”.
