El PSOE se impuso el 10-N en diez comunidades autónomas, cuatro menos que en las elecciones de abril, pues cedió al PP Galicia, Castilla y León y Cantabria, que recupera así tres feudos tradicionalmente suyos, y Murcia a Vox, que gana por primera vez en el territorio de una comunidad. Vox fue también el más votado en la ciudad autónoma de Ceuta, y el PP, en la de Melilla, donde ya había vencido en abril.En Cataluña se impuso ERC; en el País Vasco, el PNV; y en Navarra, Navarra Suma (que aglutina a PP y UPN). La fragmentación territorial del Congreso aumenta con la irrupción de dos nuevas fuerzas locales -la CUP (Cataluña) y Teruel Existe (Aragón)- y el regreso después de 14 años de una tercera, el BNG (Galicia).
En Cataluña, pese al triunfo de ERC, el secesionismo no logró el rédito esperado y solo creció en 1 diputado a pesar de la agitación tras la sentencia del ‘procés’. El constitucionalismo volvió a ganar en votos y escaños: más de 2 millones de sufragios y 25 diputados frente al 1,6 millones de votos y 23 escaños de los separatistas. ERC perdió 2 escaños (13), pero su retroceso se vio compensado por la irrupción de la CUP, que entra por primera vez en el Congreso con 2 actas, y por la mejora en 1 escaño de JxCat (8). El PSC fue segundo con 12 diputados (los mismos que en abril). Los ‘comunes’ repitieron 7 y PP (+1), Vox (+1) y Cs consiguieron 2 cada uno, pero Ciudadanos perdió 3. Aunque ERC ha evitado descartar una nueva abstención para investir a Pedro Sánchez durante toda la campaña, el castigo inflingido por el electorado secesionista desaconseja a los republicanos repetir la operación si no quieren poner en peligro su ventaja sobre JxCat para imponerse en las próximas elecciones al ‘Paralment’. Unos comicios que ERC planeaba forzar en los próximos meses aprovechando la debilidad del ‘president’ Quim Torra.
En el País Vasco vuelve a ganar el PNV, que repite 6 diputados. PSOE y Bildu obtienen otra vez 4 cada uno, pero los independentistas suben dos puntos en porcentaje de voto. La dispersión del sufragio de los tres partidos del centroderecha estuvo a punto de dejarlos de nuevo sin representación. Solo el PP consiguió a última hora 1 escaño por Vizcaya, y eso después del recuento del voto CERA y de que se subsanaran ciertas irregularidades que habían permitido adjudicar al principio el acta al PNV.
En Navarra repite victoria Navarra Suma (PP y UPN), pero Bildu crece un 4% en votos (hasta el 17%, casi tanto como en el País Vasco) y logra por primera vez un escaño, lo que le pondrá en Madrid con un total de cinco. El PSN de María Chivite (1), que gobierna la Comunidad en coalición con Geroa Bai (PNV), pierde un escaño y 20.000 votos.
En Galicia, el PP vuelve a ganar unas generales, tras perder las de abril frente al PSOE por un escaño y 40.000 votos. Con los mismos escaños que los socialistas (10), consiguen 10.000 sufragios más. El BNG (1) regresa al Congreso, donde no estaba desde 2015. Cs pierde sus dos escaños y Vox no consigue ninguno. Tampoco en las municipales logró ningún concejal.
En la Comunidad Valenciana se impone otra vez el PSOE, que en abril lo hizo por primera vez en unas generales después de tres décadas, pero el bloque de la derecha gana al de la izquierda con 17 escaños frente a 15. Vox pasa de cuatro a siete. Ciudadanos desaparece.
En Madrid, volvió a ganar el PSOE, pero perdió 1 diputado y empató en escaños con el PP, que recuperó 3, pese a la sombra de Vox, que consiguió 7 (+2) y se situó como la tercera fuerza. Cs se desplomó desde la segunda posición en abril, liderando el bloque del centroderecha, hasta la quinta, pasando de 8 a 3 diputados. Podemos (5, -1) mantuvo el tipo frente a Más País, que obtuvo en Madrid 2 de sus 3 actas.
En Andalucía se impone de nuevo el PSOE (25, +1), lo que permite a Susana Díaz reivindicarse frente a Pedro Sánchez. El PP, que en abril había quedado por debajo de Cs en número de votos, gana 4 escaños (15), pero es superado por Vox en las provincias de Sevilla, Cádiz, Huelva y Almería. Cs –que gobierna en coalición con los populares en la Comunidad- cae estrepitosamente, perdiendo la mitad de los votos y 8 de sus 11 escaños. El secretario general del partido, José Manuel Villegas, cabeza de lista por Almería, se queda sin acta. Podemos baja de 9 a 6 escaños.
En Castilla y León, el PP recupera el primer puesto, con 13 escaños (+3). El PSOE queda segundo, con las 12 actas de abril. Vox crece espectacularmente de 1 a 6 y Cs –que gobierna en coalición con los populares en la Comunidad- pierde las 8 que tenía.
En Aragón gana el PSOE sumando un acta (6), pero la gran novedad es la irrupción en el Congreso de Teruel Existe, una agrupación ciudadana sin ideología nacida en 1999 para reivindicar comunicaciones y repoblación y que representa la “España vaciada”. Vox se impone por primera vez en Murcia, empatando a 3 escaños con PP y PSOE, pero con 10.000 votos más que los populares, y también en Ceuta, donde arrebata al PSOE la única acta.
En Canarias, el PSOE retiene sus 5 actas y el PP pasa de 3 a 4. Podemos, Vox y Coalición Canarias-Nueva Canarias (por primera vez en coalición) obtienen 2 cada uno.
En Castilla-La Mancha ganan los socialistas con 9, por 7 del PP y 5 de Vox. En Baleares hubo un cuádruple empate a 2 escaños entre PSOE, PP, Vox y Podemos, resuelto a favor de los socialistas por 11.500 votos.
En Cantabria, el PP (2) arrebata la plaza al PSOE (1). El PRC del presidente Miguel Ángel Revilla y Vox también logran 1 diputado.
En La Rioja, PSOE y PP empataron también a 2 escaños, pero los socialistas lograron 1.100 votos más.
En Melilla, el único escaño fue para el PP.
