El presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, asistió el pasado viernes 7 de marzo en Buenos Aires al acto de apertura del curso escolar de los alumnos de nivel secundario que asisten al Instituto Argentino Gallego Santiago Apóstol, donde manifestó el compromiso del Gobierno gallego de colaborar para que todos los descendientes de emigrantes que deseen estudiar allí puedan hacerlo.
Rueda, quien estuvo acompañado por el conselleiro de Emprego, Comercio e Emigración de la Xunta, José González, por el secretario xeral da Emigración, Antonio Rodríguez Miranda, y por el delegado de la Xunta de Galicia en Argentina, Alejandro López Dobarro, fue recibido al llegar por el presidente del consejo de administración de la Fundación Galicia América, Manuel Peleteiro Pérez, por el director general del colegio, Carlos Brandeiro, y por los alumnos del jardín de infantes, preescolar y primer grado que asisten a la institución educativa, quienes cantaron una canción de bienvenida a la comitiva.
A continuación, el presidente de la Xunta y los funcionarios que lo acompañaron se dirigieron a través del colegio hasta el Auditorio Valle Inclán del Centro Galicia de Buenos Aires (institución que comparte el predio en el que está ubicado el colegio), lugar en el que se desarrolló el acto de apertura de clases de los cursos de nivel secundario.
El escenario del auditorio estuvo presidido por el histórico cuadro de Castelao ‘A derradeira lección do mestre’, obra magna del arte gallego que habitualmente está expuesta en la sala de reuniones de la junta directiva del Centro Galicia de Buenos Aires, cuyo presidente, José María Vila Alén, también participó del acto. De esta manera, la institución educativa se sumó al reconocimiento al máximo prócer de la cultura y la política de Galicia en ocasión del Año Castelao declarado por el Parlamento gallego en conmemoración del 75º aniversario de su fallecimiento.

Durante el acto, el responsable en Argentina de la Fundación Galicia-América, que gestiona a la institución educativa. expresó el honor que representa para todas las autoridades y cuerpo docente del colegio recibir en sus instalaciones al presidente de la Xunta, y recordó que esta obra no hubiera sido posible sin la ayuda del Gobierno gallego.
Peleteiro recordó a los miles de emigrantes gallegos, muchos de ellos labriegos que no sabían leer ni escribir, que desde la emigración ayudaron a que se abriesen bibliotecas, instituciones culturales y educativas, siendo la máxima de todas ellas el Instituto Santiago Apóstol, que en la actualidad acoge a alrededor de 500 alumnos en todos sus niveles educativos.
En ese sentido, aprovechó la ocasión para solicitarle a la Xunta su colaboración para que las familias gallegas con menores recursos y que no pueden afrontar el pago de la cuota puedan de todas maneras enviar a sus hijos a la única institución educativa gallega que existe fuera de Galicia, en la que los niños y niñas aprenden desde pequeños a leer, escribir y hablar en gallego, y concluyó: “Queremos agradecer a nuestro presidente, porque su presencia significa un reconocimiento a la labor no sólo de los trabajadores de este colegio, sino también a la de toda la colectividad”.

Por su parte, Rueda manifestó “tomar nota del encargo” que le transmitió Peleteiro y aseguró la colaboración de la Xunta para ayudar a las familias de origen gallego que desean enviar a sus hijos al Santiago Apóstol pero no pueden hacerlo por razones económicas: “No podemos fallarles a aquellos gallegos que concibieron este colegio para seguir educando a sus descendientes porque ellos nunca se olvidaron de su tierra e hicieron un esfuerzo enorme para que nuestras raíces se mantengan aquí”, aseguró, y expresó su emoción por haber sido recibido “en pleno corazón de Buenos Aires por unos niños tan pequeños hablando en gallego”.
En ese sentido, el titular de la Administración gallega resaltó la importancia de mantener viva la lengua gallega fuera de Galicia, por lo que manifestó su compromiso de seguir promoviendo diversas acciones y programas con el objetivo de que las nuevas generaciones de gallegos del exterior puedan viajar a Galicia. “Seguiremos promoviendo el intercambio para que podáis hacer el Camino de Santiago y conocer la tierra de vuestros antepasados”, afirmó mirando a los alumnos presentes.
Rueda también recordó la figura de Castelao, a quien definió como “el ejemplo perfecto de lo que fue la emigración”, y rememoró “a todos aquellos que salieron desde una Galicia pobre hacia otros destinos con la única ilusión de poder trabajar y mejorar sus vidas, ayudando también a que nuestra tierra fuera mejorando poco a poco. Galicia es hoy un lugar potente que está creciendo mucho, pero que no olvida que también le debe muchísimo a aquellos que tuvieron que irse y a pesar de ello nunca se olvidaron de sus raíces”.

Siguiendo esa idea, añadió: “Castelao es una de las figuras más importantes de la cultura, la política, el pensamiento y la manera de ser de Galicia, y es por eso que este año vamos a dedicarle los 365 días para demostrar que es un símbolo de toda Galicia, tanto de los que están en nuestro territorio como de los que están en otras partes del mundo. Este cuadro que tengo a mis espaldas demuestra que muchos gallegos dieron la vida por sus ideales; es una obra magnifica, dura y muy representativa de nosotros y es muy simbólico que hoy esté aquí presidiendo este acto”.
Finalmente, el presidente de la Xunta agradeció a todos los docentes de la institución “por mantener con tanto esfuerzo nuestra cultura para que desde los más pequeños hablen gallego y mantengan viva nuestra cultura y tradiciones. Desde el otro lado del mar ustedes nos dan muchas lecciones a los gallegos que estamos en Galicia, por lo tanto, hoy vengo aquí a reconocer y agradecer toda la labor que hicieron y hacen, tanto a quienes llegaron hace un siglo en unas condiciones muy duras y supieron salir adelante sin nunca olvidar de dónde vinieron, como a quienes cien años después son plenamente argentinos sin olvidarse de que también son gallegos”.