El presidente del Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo, suspendió la negociación del pacto para la renovación del Consejo General de Poder Judicial (CGPJ) al verse engañado por Pedro Sánchez y exigió retirar la reforma del delito de sedición por ser “una incongruencia insalvable”. Así, el PP congeló la negociación tras asegurar que el ministro de Presidencia y negociador del Ejecutivo, Félix Bolaños, se había comprometido a no rebajar las penas del 1-O para satisfacer a ERC. Dice que frenó el pacto porque el Gobierno quería debilitar las instituciones y ahora tiene dos caminos: defender el Estado con todas sus consecuencias o entregarlo a los que no hace tanto se sublevaron contra el Estado.
El Gobierno y el PSOE creen que es una nueva excusa del PP para no llegar a un acuerdo y que con esa negativa los populares incumplen la Constitución. El PP respondió señalando que Moncloa se negó a garantizar al PP que ERC no entraría en el Tribunal Constitucional, es decir, que no habría perfiles favorables al independentismo entre los jueces elegidos para su renovación. Algunos medios han llegado a publicar que la reforma de la sedición que prevé el Gobierno beneficiará a políticos indultados del referéndum secesionista ilegal, como Oriol Junqueras, pues podría reducir las penas de inhabilitación aún cumplen, y podría dificultar la prisión preventiva a los fugados Carles Puigdemont y Marta Rovira si vuelven a España.