El Gobierno uruguayo interviene Casa de Galicia de Montevideo

El presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou, explicó que la medida, por el plazo de un año, busca que “no se pierdan puestos de trabajo, que no haya un déficit en la atención, organizarla económicamente y que pueda seguir andando” / Afirmó que está en contacto con la Xunta de Galicia para abordar la situación

Trabajadores y socios de la mutua frente al hospital de Casa de Galicia.

El miércoles 27 de octubre el Gobierno de Uruguay decretó la intervención de la mutualista Casa de Galicia de Montevideo “por el plazo de hasta un año, con desplazamiento de las autoridades naturales de dicha institución de sus cargos”.

La comisión interventora está a cargo de la contadora Alicia Rossi Rodríguez y la doctora Nuria Santana Miquel, explicando la resolución que ellas “cuentan con reconocida idoneidad en la materia y se mantendrán en sus cargos hasta tanto sean designadas nuevas autoridades o se resuelva la liquidación de la institución”.

Sin embargo, el presidente uruguayo Luis Lacalle Pou, explicó antes de la publicación del decreto de intervención, que busca que “no se pierdan puestos de trabajo, que no haya un déficit en la atención, organizarla económicamente y que pueda seguir andando”.

Lacalle aseguró que “hay un interés importante en el Gobierno de Galicia” informando que ha “estado en contacto con el Gobierno de Galicia. Ustedes saben de la importancia para la comunidad gallega que tienen algunas instituciones, entre ellas Casa de Galicia, la asistencia que ha habido por parte del gobierno de Galicia”, concluyendo que “estamos hablando seguido porque creemos que Casa de Galicia tiene que seguir funcionando y seguirá teniendo la asistencia que ha tenido desde el punto de vista nacional, y quizás también desde el punto de vista internacional” dejando claro que buscará que la Xunta de Galicia continúe colaborando con la mutua gallega.

También comentó que los ministerios de Salud y Economía uruguayos trabajarán en la intervención de un año y estimó que culminado el mismo “Casa de Galicia podrá volver a andar sola”, descartando así la liquidación de la mutua.

Seguimiento desde la Xunta

La Secretaría Xeral da Emigración del Gobierno gallego señaló a España Exterior que “desde la Xunta de Galicia seguimos muy de cerca las circunstancias que están viviendo Casa de Galicia y tenemos contacto con sus representantes y con las autoridades del país. Lo que deseamos es que este proceso sea de utilidad para que Casa de Galicia salga reforzada y pueda seguir atendiendo a nuestra comunidad gallega con la humanidad que la caracteriza”.

Además, recordaron que “los centros gallegos del exterior son entidades que se rigen por sus normas internas de funcionamiento y por la normativa del país en el que funcionan. Nosotros mostramos respeto por todos ellos”.

Iglesias reclama elecciones

Mientras que los funcionarios están haciendo una huelga de 36 horas que terminará este viernes 29 de octubre, votada en una asamblea en las puertas del hospital luego de conocida la intervención, el secretario general de la FUS, Jorge Bermúdez, denunció allí que la intervención de Casa de Galicia “fue parte de una operación para intentar blindar al ministro, que tiene un discurso y un accionar muy distinto al que tiene el presidente, el subsecretario y el ministro de Trabajo”. Es que el ministro de salud, Daniel Salinas, pertenece al partido Cabildo Abierto que lidera el excomandante en jefe del ejército, general Guido Manini Ríos, mientras el presidente Lacalle es del Partido Nacional.

Si bien el presidente desplazado de Casa de Galicia, Alberto Iglesias, había pedido a Manini Ríos su intervención hace unas semanas para que el ministro de Salud atendiera los reclamos de la mutua gallega, Manini, además de no ayudar, fue quien anunció antes que el ministro y el presidente que el miércoles 27 se decretaría la intervención.

Manini también aclaró el martes 26 de octubre por la mañana que “la palabra liquidación de la mutualista no lo ha dicho nunca el Ministerio de Salud Pública, no está en los planes del ministerio, sí la intervención para hacer un gerenciamiento, una administración que dé las garantías para poder continuar recibiendo el apoyo financiero necesario para que la institución pueda recuperarse de su situación complicada”, aunque los poderes a las interventoras en el decreto permiten la liquidación.

Ante estas declaraciones y las recibidas por los funcionarios de que el Gobierno busca mantener las fuentes de trabajo y la atención a los socios de la mutua gallega, ahora resta saber qué ocurrirá con las elecciones del próximo domingo 31 de octubre que han sido convocadas y a las que se presenta la lista 1917 que encabeza Eduardo Miras y la 100 que puja por la reelección de Alberto Iglesias.

Miras ya ha vivido, como directivo de Casa de Galicia, una intervención como fue la de noviembre de 2006, que culminó el 6 de agosto del 2007 entregando los interventores la institución a la directiva al frente de la cual fue reelegido el 5 de agosto de ese año Manuel Ramos.

Sin embargo, Iglesias que ha fracasado en sus intentos de evitar la intervención, reclama que se realicen las elecciones el próximo domingo, afirmando que “el interventor dirá si las suspende o no las suspende. Quiero imaginarme que no se va a violar el estatuto de Casa de Galicia, que se va a permitir que se haga una elección y que todos los socios, la masa social, los verdaderos dueños de Casa de Galicia, puedan expresar su apoyo y su compromiso”.

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