El Gobierno uruguayo facilita el regreso a casa de cientos de españoles

Mediante un corredor humanitario a través del aeropuerto de Montevideo para que los turistas que se encontraban en varios cruceros por el Atlántico Sur pudiesen regresar a España, así como los científicos que estaban en la Antártida

Los participantes en el crucero ‘El retorno’ regresaron en un avión militar.

Esta semana en que casi todo el mundo ha cerrado sus fronteras, el Gobierno uruguayo ha organizado un corredor humanitario que ha posibilitado que millares de españoles y personas de otras nacionalidades regresaran a sus lugares de residencia desde el aeropuerto de Montevideo, y que uruguayos y también españoles residentes en Uruguay, volvieran al país.

Si bien en Uruguay no se ha decretado aún la cuarentena obligatoria, el Ejecutivo del presidente Luis Lacalle Pou apeló a la responsabilidad de los ciudadanos y les instó a quedarse en casa como forma de enfrentar la pandemia que ya ha provocado el primer fallecido ocurrido en el hospital de la Asociación Española. Se trata de Rodolfo González Risotto, docente, historiador, especialista en Derecho Electoral y ministro de la Corte Electoral y miembro apreciado del Partido Nacional. En Uruguay hay más de tres centenares de contagiados y ocho de ellos están internados de gravedad en los centros de tratamiento intensivo de Montevideo.

Rodolfo González Risotto.

Retorno a casa

Por otro lado, uno de los grandes problemas que afrontaba el país eran los millares de uruguayos que estaban dispersos por todo el mundo, con pasajes de vuelos que se cancelaban por los cierres de frontera, cruceros que les bajaban en puertos de donde no partían aviones y algunos que no encontraban la forma de regresar al país.

El canciller uruguayo, Ernesto Talvi, explicó la pasada semana que “se está buscando la solución junto a Argentina y Brasil, para traer a los uruguayos y al mismo tiempo aprovechar esos vuelos para enviar a europeos que están en cruceros por el Atlántico Sur”.

Así fue como se fue organizando el llamado “corredor humanitario” que posibilitó que mil uruguayos llegaran al aeropuerto de Carrasco de distintos destinos, tanto en aerolíneas comerciales como en vuelos de la Fuerza Aérea de Uruguay. Entre ellos el sábado 28 de marzo llegaron en dos aviones de la Fuerza Aérea, el Hércules con 70 pasajeros y el Brasilia con 13, los pasajeros del crucero Costa Pacífica que arribó a Italia sin poder atracar en puertos españoles en el primer viaje de ‘El Retorno’ que contó con la colaboración de las federaciones de entidades españolas de Argentina y Uruguay.

El pasado jueves 26 de marzo arribaron cuatro pasajeras que regresaron por Buenos Aires y el avión Brasilia de la Fuerza Aérea las llevó a Montevideo, ya que las fronteras están cerradas. Y el sábado 28 de marzo por la tarde fueron 83 que arribaron a Sao Paulo en un vuelo comercial desde Italia. Este grupo fue trasladado a Montevideo en dos aviones de la Fuerza Aérea.

Participantes en el viaje ‘El Retorno’ que llegaron a Buenos Aires y luego fueron llevados a Montevideo.

Los ministros de Defensa, Javier García, y de Relaciones Exteriores, Ernesto Talvi, les estaban esperando en el aeropuerto y tras el control sanitario y recibir las instrucciones del aislamiento sanitario que deben realizar por lo menos por quince días, todos los pasajeros con mascarillas les dieron las gracias por los esfuerzos realizados para devolverlos a casa.

Si bien la mayoría eran uruguayos, también había un buen grupo de españoles que residen en Uruguay desde el siglo pasado y mantienen la nacionalidad española con permiso de residencia porque nunca adoptaron la ciudadanía uruguaya a la que tenían derecho.

Fuera del aeropuerto les esperaban algunos de sus familiares que, si bien muchos les abrazaban rompiendo el pedido de los médicos, igualmente les llevaban a sus domicilios donde harán la cuarentena para descartar que estén infectados con el virus.

La vuelta a España

Mientras tanto, varios cruceros que surcaban el Atlántico fueron sorprendidos con el cierre de puertos y aeropuertos cuando acabaron sus itinerarios.

Cruceristas españoles y europeos regresaron a sus países a través de la capital uruguaya.

Uruguay ofreció el puerto de Montevideo como cabecera del corredor humanitario para posibilitar el traslado desde los barcos hasta el aeropuerto y allí embarcar rumbo a sus países de residencia.

Ya se han realizado más de media docena de estos descensos de los cruceros, donde viajaban españoles, de otros países de todo el mundo. Se han dividido en dos rumbos, por un lado los de Oceanía y Norteamérica lo hicieron a través de vuelos hacia Santiago de Chile, en tanto los europeos lo hacían con vuelos directos aprovechando los regresos de uruguayos por Iberia y otras compañías.

Científicos de la Antártida

El sábado 28 de marzo, un vuelo de Iberia que la jornada anterior había traído a uruguayos desde España, volvió a Madrid con 168 pasajeros españoles provenientes de cruceros que recorrían el Atlántico Sur, y 37 científicos españoles que estaban en la Antártida a bordo del Buque de Investigación Oceanográfico Hespérides.

Científicos españoles que estaban en la Antártida regresaron a España a través de Montevideo.

El embajador de España en Uruguay, Javier Gómez Llera, fue al puerto de Montevideo ese día por la mañana a recibirles, donde explicó la situación que se estaba viviendo para dejar en el buque solamente a la tripulación militar española, descendiendo del mismo “37 científicos civiles que regresan de la Antártida”, agradeciendo a las autoridades uruguayas que les han facilitado el transporte hasta el aeropuerto de Carrasco, donde tomarán un vuelo especial de Iberia junto a otros españoles que estaban aquí retenidos por la suspensión de las conexiones aéreas con Europa a causa del coronavirus, para poderlos llevar a España junto a otros europeos que llegaran a sus países vía Madrid.

El embajador aclaró que “esta ha sido una operación muy complicada” porque hubo que identificar a cada una de las personas que estaban en Uruguay de paso, turistas y visitantes, para estar en contacto con ellos y culminar el operativo cuando todos los pasajeros subieron al avión de Iberia con destino a Madrid.

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