El embajador Javier Gómez-Llera visitó a la asamblea de delegados de la Federación de Instituciones Españolas del Uruguay (FIEU) para despedirse de ellos, recibiendo una medalla por los 55 años de la institución, al tiempo que respondió que “nos volveremos a ver”.
La noche del pasado 8 de noviembre comenzaba en el Club Español de Montevideo la asamblea mensual de delegados de la FIEU bajo la presidencia de Jorge Torres Cantalapiedra junto a sus compañeros de directiva, cuando de pronto una visita interrumpió la misma.
Se trataba del embajador Javier Gómez-Llera que venía a despedirse de los directivos con quien ha tenido la oportunidad de conocerlos y trabajar conjuntamente para ayudar a los españoles que residen en Uruguay.
Torres, junto a presidentes y delegados, le agradecieron al embajador saliente “sus servicios en el tiempo que estuvo en Uruguay, apoyando siempre las actividades de la Federación y tratar de transmitirle cuál fue el sentido de nuestra colectividad durante su residencia en el país”.
Luego Gómez-Llera firmó el libro de honor de la Federación en la sala de sesiones del Club Español, al tiempo que la FIEU le entregó la distinción de la medalla del 55 aniversario de la entidad que nuclea a gran parte de los clubes españoles de todo el Uruguay.
La emoción que transmitía el diplomático español no solo quedó en su rostro, sino que también agradeció a todo el colectivo, prometiendo volver “a un país que me ha acogido con los brazos abiertos”, confesando que lo quiere muchísimo y va a volver a Uruguay, “una y otra vez”.
Posteriormente, la asamblea de la FIEU continuó con su orden del día, donde se estableció la despedida del año en el Centro Gallego de Montevideo el próximo 6 de diciembre, para culminar con un minuto de silencio ante el fallecimiento reciente de quien fuera presidente de Alma Gallega, Manuel Picos, de Eliseo Rivero, del Centro Ourensán, Hogar Español y AEGU, así como también de María García de Unión Hijos de Morgadanes.
