El Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior (CGCEE) aplaude la eliminación del voto rogado, una medida que “ha lastrado los derechos fundamentales” del colectivo durante los últimos once años.
“Es muy satisfactorio ver cómo la ciudadanía en el exterior recuperamos un derecho fundamental. Esperamos que este derecho se ejerza de forma mayoritaria y se puedan recuperar los porcentajes de participación previos al voto rogado o, incluso, mejorarlos”, afirmó en un comunicado la presidenta del órgano de representación de los españoles en el extranjero, Violeta Alonso. En este sentido, Alonso destacó que “una participación alta propiciaría que los partidos políticos escuchen con más atención las demandas y necesidades de los emigrantes”.
Además, señaló que “el Consejo General seguirá impulsando posibles puntos de mejora en el sistema electoral para los residentes en el exterior, como puede ser la incorporación de nuevas tecnologías o la posibilidad de contar con nuestros propios representantes en las Cortes Generales”.
Sobre este punto, el CGCEE ofrece su colaboración como órgano consultivo a la subcomisión creada en el Congreso para explorar la posibilidad de una reforma más amplia de la ley electoral en relación con el ejercicio del voto desde el exterior. “Las demandas de la ciudadanía en el exterior pasan por la consecución de una circunscripción exterior, que permita a los más de 3 millones de residentes en el extranjero tener representación parlamentaria –como ya ocurre en países de nuestro entorno–, así como por el aumento de garantías que permitan asegurar la llegada del voto para aquellos que no pueden desplazarse hasta el consulado, de especial importancia para los llamados países-continente, como Australia, Brasil o Canadá, por mencionar algunos”, indicó el CGCEE en el comunicado.
“El ansiado fin del voto rogado es el comienzo de un camino y no un destino final, pero el apoyo de todos los partidos a retirar las trabas que ellos mismos impusieron en 2011, ha de complementarse con la inclusión de soluciones a los problemas de la emigración en sus programas electorales. Quizás, la circunscripción exterior que ya disfrutan en Italia, Francia, o Portugal sea el siguiente paso lógico”, resaltó el presidente de la Comisión de derechos civiles y participación del CGCEE, David Casarejos.
Además de los temas electorales, el Consejo reitera la interpelación ya realizada el pasado mes de junio a los representantes parlamentarios que asistieron al pleno inaugural del VIII Mandato de este órgano, en la que se transmitía que las reivindicaciones de la emigración no se limitan a la derogación del voto rogado, “pese a haber sido ésta la protagonista de nuestras reivindicaciones durante la última década”. La apertura de más Aulas de Lengua y Cultura Españolas (ALCE), la dotación de más recursos y creación de nuevos consulados, la homogeneización de los planes de retorno en todo el territorio nacional, la reducción de plazos para la homologación de títulos o la protección real a víctimas de violencia de género en el exterior, son algunas de las demandas realizadas por el CGCEE.
Por otra parte, Casarejos también se refirió a la Ley de Memoria Democrática. “Al igual que la reforma de la Loreg ha sido votada por unanimidad, esperamos que en las próximas semanas se apruebe la Ley de Memoria Democrática, que a través de la disposición adicional octava, permitirá que muchas españolas y españoles puedan acceder a una nacionalidad que les ha sido negada y, quizás, es hora de mirar fuera del prisma de partidos e incorporar algunas de las enmiendas que añaden más flexibilidad y derechos a esta ley”, señaló.
Lo que tienen que derogar es esa ley que no permite a los pensionistas españoles residents en Europa, participar en los viajes del Imserso, por no tener una pension española. Apesar de haber trabajado varios años en España. Es una gran discriminacion del Gobierno actual y de Feijoo por no reclamar.