La incompatibilidad informática entre consulados y Oficina del Censo dificulta la depuración del CERA

El catedrático de Derecho Constitucional y especialista en voto exterior, Ricardo Chueca, duda mucho que la revisión esté lista en el plazo de seis meses que prescribe la nueva regulación

voto exterior
Charla de Ricardo Chueca en la Junta General del Principado.

El catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad de La Rioja, Ricardo Chueca, afirmó en una charla pronunciada el pasado 6 de febrero en Espacio Fundamentos, foro organizado por la Junta General del Principado de Asturias en Oviedo, que uno de los problemas para la revisión del Censo Electoral de Residentes Ausentes (CERA) es que “el sistema informático del Servicio Exterior es incompatible con el de la Oficina del Censo Electoral (OCE) y no se pueden enviar los datos de uno a otro sino que hay que hacerlo analógicamente, viene la lista y hay que empezar a meterlos en el otro”.

Además, señaló que la escasez de medio materiales y humanos del Servicio Exterior español y la obsoleta normativa que regula el Registro de Matrícula Consular, “que es de cuando las cosas iban a caballo”, van a hacer imposible, desde su punto de vista, que el CERA se haya revisado en el plazo de 6 meses que es cuando marca que hay que hacerlo la nueva regulación del voto exterior que entró en vigor el pasado mes de octubre de 2022.

Ricardo Chueca formó parte de un grupo de 15 especialistas en la regulación del voto de los ciudadanos españoles en el exterior responsables de un documento de trabajo utilizado por la Comisión Constitucional del Congreso a la hora de abordar la reforma del sistema de sufragio de los residentes en el extranjero.

Durante su intervención el catedrático de Derecho Constitucional hizo hincapié en que para que el sistema de votación de los españoles en el exterior funcione es imprescindible saber con la mayor exactitud cuántos son los electores y de ahí la necesidad de revisar y depurar el censo.

Y además de advertir sobre las dificultades técnicas que tendrá esta tarea, Chueca también se refirió a otras variables que inciden desde hace año en el incremento del número de inscritos en el CERA. En concreto los procesos de acceso a la nacionalidad. En 2007 la Ley de Memoria Histórica, por la que 321.985 personas adquirieron la nacionalidad española. Ahora, la Ley de Memoria Democrática. Y también el procedimiento específico establecido para los sefardíes, a través del cual “se han concedido unas 62.000 nacionalidades y hay más de 200.000 solicitadas”, según dijo.

Respecto a cómo influirá la nueva regulación del voto exterior en la participación, afirmó que “suponemos que votará más gente” porque la ley “mejora mucho” el procedimiento. Pero al mismo tiempo recalcó, “pero esto funciona siempre que el censo sea fiable”.

Chueca también expresó sus dudas sobre el hecho de que todos los inscritos en el Padrón de Españoles Residentes en el Extranjero (PERE) pasen automáticamente a formar parte del CERA al cumplir la mayoría de edad. “El derecho al sufragio tiene un carácter simbólico, pero también da la posibilidad de configurar el poder representativo. No tengo una posición clara”. Sobre el voto telemático se limitó a señalar que “es un tema delicado”.

En su opinión, “los medios de comunicación seguirán sacando noticias de gente del exterior que no pudo votar” y concluyó señalando que el voto exterior “es un tema abierto que no va a estar cerrado nunca y mucho menos en los próximos años”. Añadió que con el voto desde el exterior se crean “unas expectativas imposibles de satisfacer” y, aunque reconoció que con la nueva ley “va a mejorar mucho”, advirtió que “siempre habrá problemas”.

Exteriores dice que la depuración está en curso

Justo cuatro días después de esta conferencia, el pasado 10 de febrero, el subsecretario de Asuntos Exteriores, Luis Manuel Cuesta Civis, afirmó ante el Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior que el Ministerio, en coordinación con el Ministerio de Interior y la Oficina del Censo Electoral “estamos trabajando para dar cumplimiento a las previsiones” de la nueva regulación del voto exterior. Esto incluye, según señaló Civis, “el desarrollo de un proceso de depuración del censo, actualmente en curso, así como la aprobación de una nueva normativa para digitalizar el Registro de Matrícula Consular y para regular la apertura de centros de votación en lugares distintos de las oficinas consulares”.

Cabe recordar que el censo que se utilizará en las elecciones autonómicas del próximo 28 de mayo será el cerrado a 1 de febrero de 2023 y que la revisión del CERA tiene que estar culminada el próximo 4 de abril, seis meses después de la entrada en vigor de la nueva regulación del voto exterior.

UN comentario en “La incompatibilidad informática entre consulados y Oficina del Censo dificulta la depuración del CERA

  1. Una base de datos bien pensada, que abarque el universo de los datos, que sirva de fuente que alimente cualquier aplicación que se desarrolle para los distintos entes y que se nutrirá de ésta es el factor primordial. Es imposible manejar sistemas con diferentes conceptos y criterios a la hora de procesar información, partiendo de orígenes distintos lo que da como resultado resultados poco confiables.

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