En el Centro de Castilla y León de Mar del Plata se llevó a cabo el almuerzo en conmemoración al Día Internacional de la Mujer durante el cual se hizo entrega de la Estatuilla Isabel la Católica a Olga Paravizini en reconocimiento a su compromiso con los más vulnerables.
Olga Paravizini es coordinadora de la ‘Noche de la caridad’ desde sus inicios. Esta iniciativa es un servicio que se presta desde hace más de 20 años en la ciudad de Mar del Plata. Todas las noches, los 365 días del año, cerca de 300 voluntarios de distintas parroquias de la diócesis salen al encuentro de los más vulnerables llevando un plato de comida caliente, ropa de abrigo, frazadas y, fundamentalmente, a escuchar.
En el año 2021 por la pandemia y gracias a la solidaridad y generosidad de mucha gente de esta ciudad, la ‘Noche de la caridad’ alquiló tres hoteles y hostales y algunas plazas más donde se alojaron 120 personas durante los meses de crudo invierno. Se les brindó alojamiento y comida y, a través de un equipo interdisciplinario, atención terapéutica.
Olga Paravizini trabaja anónimamente desde hace 20 años en la ‘Noche de la caridad’ desde la parroquia de San Francisco de Asís, ya sea consiguiendo lo necesario, cocinando o repartiendo viandas.
Como referente social, siempre ha denunciado la pobreza y el creciente número de personas que, por falta de oportunidades, se encuentra en la calle.
Lleva adelante el servicio con creatividad y paciencia como parte de la Comisión conformada junto con el padre Héctor Díaz, María Cristina Churio, Alejandro Navarro, Eduardo Greco y Carlos Uhart.
En el almuerzo actuó el cuerpo de baile Virgen del Camino de la institución, bajo la dirección de la profesora Liber Otazua, que presentó un hermoso pasodoble y vario bailes tradicionales de Castilla y León.
De la mano del tango, Marisa Holman, acompañada de José Luis la Rocca, deleitó a los presentes en el salón totalmente colmado de socios y amigos.