Casa de Galicia de Montevideo acogió el festival “Nin coros nin cantareiras”

Esta iniciativa, en la que participaron grupos de seis entidades gallegas, se creó alrededor del programa Escolas Abertas de la Secretaría Xeral da Emigración de la Xunta de Galicia

Coro y cantareiras de Casa de Galicia.
Coro de Alma Gallega y a un lado el coro del Patronato da Cultura Galega.
Beatriz Montero e Ismael Martínez.
Autoridades presentes.
Grupo de Escolas Abertas.

“Nin coros nin cantareiras” en Casa de Galicia. Con esta “retranca galega”, seis instituciones gallegas de la capital uruguaya organizaron un festival subvencionado por la Xunta de Galicia.

El evento tuvo lugar la noche del pasado 7 de junio en el salón donde funcionaba el restaurante de Casa de Galicia, un emblemático lugar donde muchas tertulias de connotados emigrantes se dieron cita en el siglo pasado, cuando lo frecuentaban desde el mismísimo Castelao hasta los más encumbrados políticos uruguayos.

En esta oportunidad, mientras Casa de Galicia oficiaba de anfitriona, el locutor del acto fue el exbibliotecario Ismael Martínez, a quien acompañó Beatriz Montero del Centro Gallego. Ambos se encargaron de la conducción de este evento guiando la barca a través de distintos puertos donde se fueron embarcando los coros de las instituciones nombradas, la del Pontevedrés, la del Patronato da Cultura Galega, la de Alma Gallega, del Valle Miñor y Unión Hijos de Morgadanes.

Y como siempre los integrantes de las Escolas Abertas 2018 también demostraron su repertorio lleno de morriña y alegría por su impronta de entregar su corazón a los emigrantes presentes.

En la primera fila estaban, además de los presidentes de las instituciones nombradas, el consejero de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social en Uruguay y Paraguay, Vicente Pecino, acompañado del presidente de la federación de sociedades gallegas del Uruguay, Román Nogueira.

Cada uno de los coros y el grupo con integrantes de todas las instituciones que viajó a Escolas Abertas el año pasado, consolidaron un proyecto que fue apoyado por la Xunta de Galicia que llevó como título “Nin Coros, nin cantareiras”, pero con su retranca gallega lo que si hubo fueron coros y cantareiras, además de las tradicionales bandas de gaita que acompañan las interpretaciones polifónicas.

El gusto fue a poco, pero ya quedó sembrada la segunda edición de este festival que sin duda en 2020 atraerá más público del que colmó el salón de Casa de Galicia.

Todos los participantes se llevaron un diploma otorgado por la Xunta de Galicia que sin duda les permitirá de vez en cuando darle una ojeada y así amorriñar esta noche tan especial.

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