Cerca de 800 personas participaron el pasado 5 de mayo en los festejos por el Día de la Comunidad de Castilla y León en el Centro Recreativo ‘La Cecilia’ del Municipio Playa de La Habana. La celebración fue organizada por la Agrupación de Sociedades Castellanas y Leonesas (Ascyl) y reunió en los jardines y área techadas de la instalación a centenares de asociados y directivos de las siete entidades integradas en la Ascyl. Entre los invitados estuvieron la ministra consejera de la Embajada de España en Cuba, Nuria Reigosa; el cónsul general adjunto, Carlos Ruiz; el consejero de Interior de la Embajada, Fernando Martínez; el jefe de la Sección de Empleo y Seguridad Social en La Habana, Jesús Chacón; el presidente del Consejo de Residentes Españoles (CRE), Carmelo González; funcionarios de la Embajada y del Consulado General de España en Cuba; representantes de las comunidades españolas; funcionarios de la Oficina del Historiador y otros invitados.
Una vez escuchados los himnos nacionales de Cuba y de España se dio lectura a la tradicional semblanza de la Batalla de Villalar y sobre otros acontecimientos posteriores que dieron lugar a que la fecha del 23 de abril fuera la escogida para la celebración del Día de la Comunidad. A continuación se proyectó un audiovisual dedicado al 20º aniversario de la Casa de Castilla y León en la capital cubana inaugurada el 5 de abril de 1998.
Intervenciones
La presidenta de la Ascyl, María Rabanillo, tuvo a su cargo las palabras centrales del acto. En su intervención hizo un recuento de las distintas ubicaciones que tuvo la sede social de la Agrupación después de la desaparición del Centro Castellano de La Habana en 1961, hasta llegar al año 1998, cuando el entonces presidente de la Agrupación, Sergio Rabanillo, y un grupo de entusiastas directivos de las entidades se propusieron “permutar el local que poseían en la calle San Rafael por el local de una tienda en desuso que se encontraba en un estado precario”. Así, “la osadía, dirección y visión de Sergio Rabanillo, convirtió un local abandonado en una institución de vanguardia, ejemplo de amor por la emigración, por la tierra que los vio nacer, sus costumbres, tradiciones, honradez y valentía”, señaló la presidenta de la Ascyl. A partir de 1998 la Agrupación deja de ser un nombre para convertirse en realidad. Por último, la titular de la Agrupación agradeció a todos los que hicieron realidad esa tarea, a los que participaron en la reconstrucción y en su funcionamiento en estos 20 años, y “a Sergio, gracias por su legado”.
Por su parte, la ministra consejera de la Embajada, Nuria Reigosa, felicitó a la colectividad castellano y leonesa en su día “para nosotros -dijo- es una gran satisfacción, un honor, poder compartir esta actividad con ustedes, y comprobar que este esfuerzo, que este entusiasmo y ese ánimo por mantener las costumbres, la cultura, la música, se mantiene vivo. Y sabemos, además, que con un gran trabajo por parte de los miembros de la asociación”. Reigosa transmitió un saludo y el apoyo de las autoridades diplomáticas, consulares y laborales de España en Cuba a las entidades hispanas en la Isla y a la labor que realizan.
Entregan reconocimientos
Seguidamente, la presidenta de la Comisión de Jóvenes de la Ascyl, Dalía Cruz, hizo entrega de un reconocimiento a Sergio Rabanillo Dámera “por su osadía en enfrentar grandes retos y su esfuerzo por lograr grandes resultados”. También lo recibieron María Antonia Rabanillo y Elena Llimó, directivas del grupo de las fundadoras de la Casa de Castilla y León en 1998 que aún se mantienen en activo “como símbolo del papel protagónico de las mujeres en la vida de nuestras sociedades”. Entregó el diploma la presidenta de la Comisión de Mujeres de la Ascyl, Mirta Ríos.
Gala
En la gala artístico-cultural participó un elenco integrado por niñas y jóvenes del Proyecto Comunitario ‘Futuro Renacer’, dirigido por las profesoras Antoinette Torres y Dolly Santos, con dos números: ‘Dorante’ y ‘To Mezclao’. También actuaron la cantante Leo Montesinos con lo mejor de su repertorio; la Compañía de Baile Flamenco ‘Ecos’ y hubo un recital de música en vivo y grabada de la década prodigiosa. La conducción y animación del espectáculo estuvo a cargo de Dalia A. Cruz Trutié. La actividad finalizó con una cena.
