La Xunta invirtió desde 2009 cerca de 1,5 millones de euros en distintos proyectos de cooperación en Guinea Bissáu, uno de los países más pobres del mundo y considerado como prioritario en el IV Plan de Cooperación Galega (2018-2021).
El vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y el director xeral de Relacións Exteriores e coa UE, Jesús Gamallo, visitaron el pasado 22 de junio algunos de los proyectos que se llevaron a cabo gracias a la financiación de la Cooperación Galega.
Por la mañana se acercaron hasta el centro CIDA, situado en la propia ciudad de Bissáu, y construido y equipado con fondos de la Xunta, en colaboración con la Asemblea de Cooperación poa Paz (ACPP) y su socio local Asociación Guineana de Estudios e Alternativas (Alternag). El Centro CIDA se dedica a la prevención, diagnóstico y tratamiento del VIH y se ha convertido en un centro de referencia a nivel nacional, en un país con las tasas de prevalencia del virus más altas de todo el África Occidental. En sus instalaciones se atiende y se realiza seguimiento de más de 1.300 personas cada año.
Por la tarde se desplazaron hasta la zona rural del norte del país, a la región de Bafatá. Allí conocieron de primera mano el trabajo que se desarrolla en la escuela primaria comunitaria de Sintchan Djida, que forma parte de la Red de escuelas de autogestión apoyada por la Xunta. Este proyecto se desarrolló en colaboración con la ONGD AIDA, Axuda, Intercambio e Desenvolvemento y sus socios locales: el Comité Nacional de Prácticas Nefastas para la salud de las mujeres y la Infancia (Cnapm) y la Asociación de amigos de la Niñez (AMIC). Con esta iniciativa, se busca promover el derecho a una educación inclusiva y de calidad y luchar contra la explotación infantil, entre otros fines. Cabe recordar que en Guinea Bissáu existe un importante problema de tráfico de personas, que involucra muy especialmente a los niños y niñas.
Por último, el vicepresidente de la Xunta y el director xeral mantuvieron una reunión con el Régulo de Cambadjú, la máxima autoridad tradicional de la región, en la que también participaron otros representantes comunitarios.
Al día siguiente, Alfonso Rueda y Jesús Gamallo visitaron sobre el terreno distintos proyectos de cooperación en Senegal y Guinea Bissau que fueron financiados por la Xunta.
A primera hora de la mañana se acercaron a la comunidad de Medina Alpha Sadou, en Senegal, para visitar la huerta comunitaria y la instalación piscícola construidas en 2017-2018, gracias a la financiación de la Cooperación Galega y al trabajo de la Asociación AIDA y sus socios locales: Federaçao camponesa KAFO, de Guinea; y Mouvement des Jeunes pour la Paix et l’intégration (MJPI), de Senegal.
El proyecto se localiza en la línea de frontera entre Guinea Bissau y Senegal, en dos de las regiones (Oio y Kolda) más aisladas, con mayor índice de malnutrición crónica y más afectadas por el conflicto transfronterizo por la independencia de Casamance. Las huertas comunitarias están gestionadas por mujeres, entre las que la situación de inestabilidad y las desigualdades de género repercuten con más crudeza. Gracias a las huertas, se mejoraron los ingresos y nutrición de las comunidades, y su éxito tuvo eco en comunidades vecinas, que también solicitan la construcción de huertas. El proyecto incluye un modelo innovador de piscicultura para introducir en la dieta proteína animal: la huerta se riega empleando agua fertilizada por los pescados y pescados se alimentan de los restos vegetales de la huerta.
Posteriormente, se desplazaron de nuevo al norte de Guinea Bissau para inaugurar la escuela comunitaria de Cambara Djaube. Al igual que la escuela de Sintchan Djida, que visitaron un día antes, esta escuela se construyó fruto de la colaboración entre la asociación AIDA y sus socios locales: el Comité Nacional contra las prácticas nefastas para la salud de las mujeres y la infancia (CNAPM) y la Asociación de amigos de la Niñez. El objetivo de esta actuación es mejorar la calidad y equidad educativa, aumentar la tasa de escolarización y promover los derechos de los niños y niñas.
El vicepresidente y el director xeral también mantuvieron un encuentro con representantes de la comunidad y con el director regional de Educación.
El día 24 finalizó el recorrido por proyectos de Guinea-Bissáu con una visita en la capital a la clínica de tratamiento de VIH Céu e Terras, puesta en marcha con financiación de la Xunta en colaboración con la Asociación AIDA y la asociación local Céu e Terras. El centro presta asistencia directa, con un enfoque integral e inclusivo con perspectiva de género.
Guinea-Bissáu está considerado como país prioritario en el vigente IV Plan de Cooperación Galega (2018-2021). En la última década, recibió cerca de 1,5 millones de euros de financiación por parte de la Xunta de Galicia.
