El presidente del Principado, Adrián Barbón, reivindicó el importante papel de la comunidad exterior en la construcción de la década del cambio de Asturias y la labor impagable que realizan los centros y asociaciones en la difusión y preservación de las tradiciones por todo el mundo. “Atenderemos vuestras necesidades sin circunloquios”, garantizó el pasado 24 de noviembre durante la inauguración de las nuevas instalaciones de ampliación del Centro Asturiano de Barcelona, que preside Enrique Delgado Gutiérrez.
En el acto, que contó con la presencia del alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, y del delegado del Gobierno en Cataluña, Carlos Prieto, el jefe del Ejecutivo agradeció el compromiso de una institución que ancla su porvenir en hondas raíces, que se remontan al siglo XIX. “Hoy sumáis 562 metros cuadrados a Asturias, 562 metros cuadrados, también, de ambición e ilusiones”, destacó. El centro planea usar la nueva superficie para ampliar sus servicios y también para establecer colaboraciones y difundir el conocimiento que emana de la Universidad de Oviedo.
“Queréis también ser un punto de encuentro del empresariado asturiano que opera en Cataluña y, por qué no, del empresariado catalán interesado en colaborar con el Principado. Buscáis, en definitiva, lo mejor para las dos tierras que os atraviesan. Así, con la colaboración y el trabajo por el interés común, se construyen la mejor Barcelona, la mejor Cataluña y la mejor Asturias”, expresó Barbón, que insistió en el respaldo férreo del Principado. “Allí donde estéis siempre estará vuestra patria querida y aquí, siempre con vosotros, estará vuestro presidente. Con este centro, con vuestra actividad, vuestro dinamismo y vuestra ambición, Asturias gana”, señaló.
Durante la jornada, el presidente también mantuvo una reunión con representantes del Centro Asturiano de Tarragona, que presentaron un proyecto de enseñanza del asturiano que desarrollan desde su sede y que cuenta con 17 alumnos. La institución usa la lengua asturiana como hilo conductor en todas sus actividades.