La Iglesia de Nuestra Señora de Montserrat de La Habana, designada Tesoro de la Cataluña Exterior

La ciudad acogió las 12ª Jornadas de la Cultura Catalana

Presidencia del acto.

Lo hizo el pasado 10 de noviembre durante la clausura de las XII Jornadas de la Cultura Catalana. El evento cultural tuvo lugar en el emblemático templo conocido en Cuba como Ermita de Montserrat o Ermita de los Catalanes, y durante su intervención, la titular de la SBNC  abundó sobre los criterios tenidos en cuenta para la selección de estos 7 tesoros.

“Con el paso del tiempo los catalanes del exterior han ido construyendo edificios para sedes de sus centros, han erigido monumentos a personalidades catalanas, han creado entidades, fundaciones, corales, esbarts, etc. El patrimonio cultural catalán del exterior, tanto material como inmaterial, es bien significativo, pero muy desconocido. Es por estas circunstancias que la Federación Internacional de Entidades Catalanas (FIEC) ha desarrollado la campaña ‘7 Tesoros del Patrimonio Cultural de la Cataluña Exterior”, explicó.

Elección

En el resultado de la votación popular por internet han participado 4.681 personas de la Cataluña exterior y de la interior. Se han agrupado elementos de un mismo ámbito, cuando la votación así lo ha determinado. Por ejemplo en el ámbito de los monumentos se han incluido como tesoro del patrimonio catalán más de uno.

De 33 propuestas los 7 tesoros de la Cataluña exterior elegidos son los siguientes:

-Las corales y los esbarts dançaires, (Grupos de bailes catalanes) como actividades colectivas de la Catalunya Exterior.

-Los Monumentos a Francesc Ferrer en Bruselas (Bélgica), a Pablo Casals en Rosario (Argentina) y a Luis Companys en Montevideo Uruguay.

-La Biblioteca Catalana del Instituto de Lengua y Literatura Románica de la Universidad de Frankfurt, el centro que tiene mas libros en catalán, fuera del ámbito lingüístico de la lengua catalana.

-La sede del Casal de Cataluña de Buenos Aires, como símbolo de las sedes de las entidades catalanas del mundo.

-La Iglesia de Nuestra Señora de Montserrat de La Habana (Cuba) en representación de la veneración a la Madre de Dios de Montserrat, fuera de Catalunya.

-El Claustro de San Miquel de Cuixá en el Museo The Cloisters en Nueva York, en representación del patrimonio catalán que, por circunstancias históricas, se encuentra fuera del paía.

-Las Becas Balsells, que ayudan a estudiar en el extranjero a estudiantes catalanes.

Las 12ª Jornadas de la Cultura Catalana quedaron clausuradas con una gala cultural a cargo de la Coral Polifónica de La Habana, el ‘esbart dançaire’ de la SBNC y el grupo musical ‘Voces de Ultramar’ de la propia institución.

Al acto asistieron más de un centenar de directivos, asociados e invitados entre los que se encontraban: Susana Monís, en representación de la Consejería de Empleo y Seguridad Social del Consulado General de España en La Habana; el expresidente de la SBNC y destacado profesional de la prensa gráfica, Jorge Oller Oller; Leila Benson, vicepresidenta y directora de Cultura de la institución así como otros integrantes de la Junta Directiva y representantes de sociedades españolas.

Construida dos veces

La Iglesia de Nuestra Señora de Montserrat de La Habana (Cuba) está situada en el km. 8 ½  de la Avenida de Rancho Boyeros. Es más conocida en la isla como la ‘Ermita de los Catalanes’. La historia de esta iglesia se remonta al año 1885 cuando el padre Escolapio Pere Muntadas y otros miembros del Centro Catalán de La Habana idearon construir una iglesia dedicada a la Madre de Dios de Montserrat.

Inicialmente se ubicó en la Loma de Tadino que desde entonces se llamó Loma de Montserrat o Loma de los Catalanes. En el año 1886 se colocó la primera piedra, pero no se acabó hasta el año 1921.

En el año 1951, el estado cubano expropió los terrenos y se procedió a la demolición de la iglesia, en los terrenos que ocupa hoy el Memorial José Martí, en la Plaza de la Revolución.  La Sociedad de Beneficencia de Naturales de Cataluña (el Casal de La Habana) solamente pudo recuperar algunos mármoles, el altar, la imagen de la Madre de Dios, los vitrales y las ventanas emplomadas que quedaron incorporadas al nuevo templo. En los primeros meses del 1951 se inician las obras de la nueva iglesia (a cargo de los arquitectos Vicente J. Sallés y Francisco G. Padilla). Como modelo a seguir se escogió la iglesia de S’Agaró en Cataluña, considerada una genuina representación de la arquitectura mediterránea.

La construcción de la actual ‘Ermita de los Catalanes’ finalizó en el año 1954. El templo consta de 3 naves y mide 28 metros de largo, con una fachada de 22 metros de alto. Todos los años la Fiesta de la Rosa de Abril (27 de abril) hace llegar hasta la Ermita a personas de toda la isla.