Galicia cuenta con todas las condiciones para convertirse en un punto estratégico dentro del proyecto de la nueva Ruta de la Seda y situarse como plataforma logística para el sur de Europa.
La Comunidad ha trasladado a las autoridades chinas su disposición para ser un enlace más en los planes de apertura económica del país hacia Europa gracias a su situación geográfica y a unas excelentes condiciones para el tráfico marítimo.
Los 1.400 kilómetros de costa convierten a Galicia en un enclave fundamental para el transporte de mercancías gracias al puerto pesquero de Vigo, a las dársenas exteriores de A Coruña y Ferrol y a terminales portuarias como Marín o Vilagarcía de Arousa, que, junto con los 122 puertos pesqueros, ofrecen una importante actividad diaria.