Del Corral entregó las Medallas de Honor de la Emigración al Colegio Español de Rosario, la Sociedad Española de Socorros Mutuos de Neuquén y al gerente del Club Español de Buenos Aires

El Club Español recibió la Medalla del Senado de manos de su presidente, Pío García Escudero

Pío García Escudero, el presidente de la Sociedad Española de Scorros Mutuos de Neuquén, Manuel Cuesta, y Marina del Corral en el momento de entrega de la Medalla.
El presidente del Senado firma el Libro de Oro del Club Español de Buenos Aires.
La secretaria general de Inmigración y Emigración se dirige a la concurrencia en el Club Español de Buenos Aires.
Del Corral dialoga con los familiares de Sánchez Rodríguez.
García Escudero entregó la Medalla del Senado de España al presidente del Club Español, José Benito López Carballedo.
La secretaria junto a Mira Lema y el presidente de la Federación de Sociedades Españolas de Argentina, José María Vila Alén.
García Escudero y Del Corral junto al gerente del Club Español de Buenos Aires, Juan Carlos Sánchez Rodriguez.

La secretaria de Estado de Inmigración y Emigración del Gobierno de España, Marina del Corral, entregó en Argentina las Medallas de Honor de la Emigración al Colegio Español de Rosario, la Sociedad Española de Socorros Mutuos de Neuquén y al gerente del Club Español de Buenos Aires, Juan Carlos Sánchez Rodríguez.

En el marco del viaje que realizó a al país austral para participar en la IV Conferencia Internacional para la Erradicación Sostenida del Trabajo Infantil, la máxima responsable en materia migratoria del Gobierno español visitó las ciudades de Rosario, Buenos Aires y La Plata, en las que participó en una numerosa cantidad de actos.

El miércoles 15, en compañía del presidente del Senado de España, Pío García Escudero, Del Corral presidió el acto de la entrega de las Medallas de Honor de la Emigración, en su categoría de oro, al gerente del Club Español de Buenos Aires, y a la Sociedad Española de Socorros Mutuos de Neuquén, en su categoría de plata.

La entrega de estas medallas, con las que se premia desde 1970 a personas o entidades públicas o privadas por la realización de destacados servicios a los emigrantes españoles o a la propia España, fueron presenciadas por las más altas autoridades diplomáticas, encabezadas por el embajador de España en Argentina, Javier Sandomingo; el cónsul general en Buenos Aires, Rafael Tormo, y el consejero de Empleo y Seguridad Social, José Luis Mira Lema, además de numerosos directivos y representantes de instituciones de la colectividad.

Mira Lema fue el responsable de abrir el acto con la lectura de las resoluciones del Ministerio de Empleo y Seguridad Social que dirige Fátima Báñez en las que se justifica los motivos por los que los condecorados reciben las medallas.

En primer lugar, se refirió a la Sociedad Española de Socorros Mutuos de Neuquén, entidad fundada el 14 de febrero de 1909 y que desde su creación ha desarrollado una importante labor orientada a aliviar las carencias más importantes en materia de salud de los emigrantes españoles que residen en Neuquén a través de la atención médica o la prestación farmacéutica.

Esta institución, la primera entidad mutualista de la provincia, es socia fundadora de la Federación Neuquina de Mutuales e integrante de la Federación Patagónica de Mutuales, y a lo largo de su existencia ha modificado la forma de prestar servicios gracias a los convenios suscritos con diversos colegios de profesionales, ampliando su actividad no sólo a la cobertura de las necesidades de sus asociados, sino también haciéndola extensiva a cualquier español que transite o reside en la zona y lo necesite.

Además, esta entidad desde hace más de 20 años se hace cargo de los gastos de funcionamiento del viceconsulado honorario de España en Neuquén y colabora con la Escuela España del Centro Provincial de Enseñanza Media Número 150 y con el asilo de ancianos Hermanitas de los Pobres, además de con otras instituciones, fundaciones y organizaciones dedicadas a asistir a los demás.

Todas estas razones fueron motivo suficiente para que la Medalla de Honor de la Emigración fuera otorgada a la Sociedad Española de Socorros Mutuos de Neuquén en reconocimiento a los destacados servicios prestados a la comunidad española, a su espíritu solidario, y a su labor por facilitar la integración de los españoles en Argentina, que su presidente, Manuel Cuesta, recibió de manos de Del Corral y García Escudero.

Seguidamente, Mira Lema leyó la resolución por la cual se otorgó la Medalla de Honor de la Emigración al gerente del Club Español de Buenos Aires. Hijo de emigrantes gallegos llegados a Argentina a principios del siglo XX buscando establecerse en un país que les ofreciera mejores oportunidades, Sánchez Rodríguez, además de participar en la vida social de la colectividad española en la capital argentina, ha desempeñado cargos de responsabilidad en numerosas instituciones, entre ellas el Centro Gallego de Buenos Aires, el Club Social, Deportivo y Cultural Español de Buenos Aires, el Hospital Español de Buenos Aires y el Club Español, del cual ejerce como gerente general desde el año 2006.

“Durante su larga trayectoria como miembro destacado de la colectividad española ha desempeñado sus cargos y oficios con responsabilidad y dedicación a la comunidad emigrante; amante de la cultura española, es de sobra conocida su vocación por difundirla, obteniendo por ello el reconocimiento tanto de los españoles como de los argentinos”, señala la resolución leída por Mira Lema, que concluye: “En reconocimiento a sus destacados servicios a favor de la comunidad española en Argentina, a su entusiasmo por preservar nuestra cultura en dicho país y contando con el apoyo de la colectividad, este Ministerio ha tenido a bien concederle la Medalla de Honor de la Emigración en su categoría de oro”.

Luego de que Del Corral y García Escudero le entregaran la condecoración a Sánchez Rodríguez, la secretaria de Estado de Inmigración y Emigración se dirigió a la concurrencia: “Es un honor para mí estar aquí hoy en este acto, en el que se recompensa y reconoce el recorrido de entidades y personas que han contribuido en forma notable al bienestar de la diáspora española en esta tierra”, resaltó.

En ese sentido, explicó que la Medalla de Honor de la Emigración, que un día antes había entregado al Colegio Español de Rosario, es una distinción que pronto cumplirá 50 años de existencia y que fue creada con el objetivo de premiar conductas notables y trabajos relevantes llevados a cabo en el mundo de la emigración española, tanto por los propios emigrantes como por aquellas personas que, sin serlo, han prestado servicios destacados a la colectividad española residente en otros países.

“La medalla se trata de un galardón cuya importancia se encuentra fuera de toda duda; su singularidad radica en ser el único premio creado por la Administración española para los emigrantes y para quienes han trabajado en su favor, y para merecerlo solamente hay que cumplir con un requisito y que se resume en una sola línea: haber destacado por su abnegación, esfuerzo y trabajo personal en favor del emigrante español”, subrayó.

Siguiendo esa idea, apuntó que este título honorífico “muestra la gratitud del Estado español, del Gobierno y del Ministerio de Empleo y Seguridad Social al que represento” y recalcó que ha sido recibido por figuras relevantes en el campo de las artes, la cultura y las ciencias “que han contribuido también al engrandecimiento y la mejora de la imagen de nuestro país, y a muchas instituciones, especialmente las creadas por los propios españoles en otros países, que han sido verdaderos refugios de nuestra lengua, cultura y valores”.

Haciendo referencia al origen del gerente del Club Español, Del Corral exclamó que fueron justamente los gallegos los abanderados de la emigración española, trasladando a los diferentes países de América “los usos y costumbres de sus aldeas, parroquias y municipios y el espíritu de una solidaridad comunal y un sentido de pertenencia que permitió el desarrollo de una acción solidaria sin precedentes entre las comunidades emigrantes, creando un sistema mutual extendido desde el norte al sur del continente americano que asistió de forma eficiente y eficaz a cientos de miles de gallegos y españoles desde su desembarco en sus puertos de destino”.

Por último, afirmó que las Medallas de Honor de la Emigración son galardones que hoy en día responden a las peticiones de la propia emigración, “que a través de los mecanismos que este Ministerio pone a su disposición reconoce los méritos de aquellos que se han sabido ganar su confianza y les agradece de esa manera el esfuerzo por mantener viva su presencia”, y concluyo: “Felicito de corazón a los galardonados hoy y deseo que sigan muchos años con su trabajo tan devoto y tan incondicional”.

El acto concluyó con la intervención de García Escudero, quien contó a la concurrencia que sus abuelos, nacidos en Málaga y Toledo, también tuvieron que recorrer el camino de la emigración, en su caso a México, país en el que también nació su madre. “En mi familia también ha habido emigrantes en busca de un futuro mejor, pero siempre con la añoranza, el cariño y el amor de esa España que dejaban atrás”, señaló, antes de entregar la Medalla del Senado de España al Club Español de Buenos Aires, la cual fue recibida por su presidente, José Benito López Carballedo.