El Hogar Español de Montevideo cerró el ejercicio 2015 con una deuda de 15.000 euros

Las ayudas de las administraciones públicas españolas cubren solamente el 18% de los gastos de la entidad

La presidencia de la Asamblea del Hogar, con el embajador Roberto Varela (tercero izq.) y a su izquierda el presidente de la entidad, Ángel Domínguez.
Un momento de la asamblea.
Varela se dirige a los asistentes.
Exposición de Eduardo Alonso, de la Comisión Fiscal del Hogar.

El pasado martes 25 de mayo, se reunió la asamblea general de socios del Hogar Español de ancianos de Montevideo, bajo la presidencia de Ángel Domínguez acompañado por el secretario José Fernández y el vicepresidente Constantino Mato. También estuvieron en la mesa el embajador Roberto Varela, el jefe de la Consejería de Empleo y Seguridad Social, Brindis Álvarez, y quien le suplantará en los próximos días, José Martín Blanco.

Fue justamente el embajador Varela quién se dirigió a los asistentes, directivos de todas las instituciones españolas que son dueñas del Hogar Español y los socios de ésta institución, buque insignia de la colectividad, precisando que “solamente estoy aquí para mostrar el compromiso del Gobierno español con esta institución”.

Felicitó por la labor desarrollada “a todas aquellas personas que están trabajando aquí, no a aquellos que están haciendo huelga en este momento, pero sí a todos aquellos que trabajan para mantener esta situación”. Casualmente esa fue la única mención a la huelga que el sindicato de empleados del Hogar está realizando sin que todavía se haya ofrecido información oficial.

Cambiando financiación del Hogar

En la actualidad el Hogar de ancianos de la colectividad española en Uruguay cuenta con 184 residentes que tienen un costo mensual de 1.200 euros cada uno. De acuerdo a la información proporcionada por sus autoridades en la asamblea, el 40% de los residentes paga por debajo de esta cifra.

El gasto total del Hogar es de 2.660.000 euros, de los que el 69% se cubren con los ingresos genuinos de los que allí residen, en tanto la colectividad con donaciones y eventos que organiza, cubre un 3% de los gastos.

En cuanto al aporte del Gobierno español, algunos gobiernos autonómicos y otras administraciones españolas, en el últimio ejercicio se recibieron ayudas por 480.000 euros, de las cuales el 70% las aportó el Ministerio de Empleo y Seguridad Social y el 7% el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación.

Los residentes pertenecen a muchas regiones de España pero son tan solo dos las autonomías que aportaron para el Hogar Español, la Xunta de Galicia con el 14%, y la Diputación de A Coruña con el 8%; en tanto el Principado de Asturias lo hizo con menos del 1% de los gastos anuales del geriátrico.

Por su parte, las dos mutuas médicas de la colectividad, ‘La Española’ y Casa de Galicia, aportan también con personal (tres médicos, un oftalmólogo, fisiatra, sicólogo y dos enfermeros).

Asimismo los alumnos de la Escuela Nacional de Enfermería de la Universidad de la República del Uruguay están realizando las prácticas en la institución, lo que proporciona también una reducción de la sobrecarga de trabajo que tiene el personal permanente del Hogar, ya que tan solo el 10% de los residentes son autónomos y, si bien las edades de sobrevivencia en algunos casos superan los cien años, el grado de dependencia de los mismos se agrava provocando mayor captación de personal técnico para atenderles.

La asamblea aprobó por unanimidad el balance e informe, en tanto la renovación de la directiva se dio únicamente por la renuncia de Esperanza Romariz, que será sustituida por José Martínez Graña, en tanto está previsto que se Ángel Domínguez renueve como presidente de la entidad.