La Generalitat pide a la Junta Electoral ampliar el plazo de solicitud de voto para los catalanes en el exterior

Por coincidir con el periodo de vacaciones para muchos electores y por la reducción de horarios y personal en algunos consulados y oficinas consulares de las embajadas

La consellera de Gobernación, Meritxell Borràs, en una comparecencia pública sobre el proceso electoral en Cataluña.

Según informó el pasado 18 de agostla Generalitat en un comunicado, la consellera de Gobernación y Relaciones Institucionales, Meritxell Borràs, remitió ese mismo día una carta, en nombre del Govern, al presidente de la Junta Electoral Central, Carlos Granados, para solicitar la ampliación del plazo.
En la misiva, la consellera solicita la ampliación del plazo por coincidir éste con el periodo de vacaciones para muchos electores y por la reducción de horarios y personal en algunos consulados y oficinas consulares de las embajadas.
El periodo de solicitud de voto por correo para electores residentes en el extranjero de cara a las elecciones catalanas del 27 de septiembre comenzó el día de la publicación de la convocatoria electoral, el pasado 4 de agosto, y finalizará el próximo 29 de agosto.
Según la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (Loreg), los electores que se encuentran permanentemente en el extranjero se tienen que inscribir en el censo de residentes ausentes (CERA) y hacer la solicitud por Internet, correo o fax, y la documentación le llegará, no más tarde del 15 de septiembre, y para votar puede hacerlo por correo a la oficina o sección consular, no más tarde del 22 de septiembre, o depositar su voto en una urna en la oficina o sección consular, entre el 23 y el 25 de septiembre.
Los temporales
En lo que se refiere a los residentes que se encuentran temporalmente en el extranjero, tienen que inscribirse en el censo ERTA en las oficinas de los consulados y embajada, momento en el que pueden solicitar el voto -tienen tiempo hasta el 29 de agosto-, y la documentación se enviará a su domicilio indicado hasta el 15 de septiembre y el voto se enviará por correo certificado hasta el 23 de septiembre.
Al día siguiente de la carta de la consellera, el hasta ahora portavoz de Convergència Democrática de Catalunya (CDC) en el Parlament y miembro de la candidatura de Junts pel Sí al 27S, Jordi Turull, reclamó a la Junta Electoral Central que “vigile” a las embajadas y consulados españoles, ante posibles “impedimentos” al voto de los catalanes residentes en el extranjero.
Según publicaron varios medios de comunicación, Turull aseguró que “desde el minuto cero en que el presidente Artur Mas convocó elecciones ha habido gente (en el extranjero) que ha ido a pedir información y, en algunos casos, han notado una actitud de cierto recelo y de no poner las cosas con entusiasmo fácil para que la gente pueda votar”.
Un total de 5.510.713 ciudadanos están llamados a votar en las elecciones catalanas del 27 de septiembre, de los cuales 195.533 residen actualmente en el extranjero.
Actitud de recelo
Turull, que fue presidente del grupo parlamentario de CiU en la pasada legislatura y ahora ocupa el décimo puesto por Barcelona en la lista unitaria independentista Junts pel Sí, instó así a la Junta Electoral a que “destine bastantes esfuerzos a ser vigilantes respecto a las embajadas y consulados” españoles. El objetivo es evitar que “pongan impedimentos a muchos ciudadanos catalanes que residen fuera y que ya empiezan a notar una actitud de recelo por parte de las autoridades diplomáticas para poner facilidades a votar en el 27S”.
“Un Estado moderno y que se crea democrático debe poner todas las facilidades para que la gente que reside fuera pueda ejercer su derecho a voto de acuerdo con la normativa, pero no empezar a generar dudas e intentar desanimarles para que se les haga tan complicado, se les desinforme tanto o sencillamente no se les informe y se les vayan posponiendo las informaciones para votar”, agregó.
A su juicio, el Gobierno puede optar por “ponerlo fácil o complicarlo”, pero dejó claro que en cualquier caso la Generalitat y el grupo parlamentario de CDC en el Congreso estarán “atentos” a que no se pongan obstáculos. E insistió en que la Junta Electoral sea muy “diligente” y “vigilante” ante posibles “quejas o denuncias” con relación a las actuaciones de las embajadas y consulados.