Los problemas originados por la Loreg vuelven a provocar la baja participación de los electores en el exterior

Numerosas quejas por retrasos en la recepción de la documentación

Miguel Ángel Suárez vota por la Comunidad de Madrid.
Juan José Núñez votando en Miami.
Votos recibidos en el Consulado de España en México.
Fernando Jaime vota en Montevideo para elegir al gobierno de la Comunidad Valenciana.
Liliana Ramos, cuyos abuelos emigraron desde Salamanca, recalcó la importancia de poder ejercer sus derechos como española desde el exterior.
Quienes acudieron a depositar el voto manifestaron su satisfacción por poder hacerlo.
Depositando el voto en el Consulado de Buenos Aires.

En una jornada que se desarrolló con total normalidad y tranquilidad, tan sólo 198 españoles residentes en Buenos 

Las jornadas de depósito del voto en los consulados transcurrieron marcadas por las tres características que han predominado en las nueve convocatorias electorales que ya se han celebrado desde la aprobación de la nueva regulación del voto exterior: total normalidad, graves problemas en la recepción de la documentación para votar y bajísima participación.

En el Consulado de Buenos Aires, el mayor del mundo en número de españoles inscritos, se recibieron un total de 2.335 votos, de los cuales 1.813 fueron enviados por correo certificado y 522 se depositaron en la urna instalada a tal efecto. La participación fue del 2,5% de los censados en esta demarcación, informa Leo Vellés.

Todos los españoles consultados por este medio coincidieron en manifestar su satisfacción por poder participar de este proceso electoral y estar muy informados sobre la situación política de España.

Así lo expresó Alicia Ajón: “Estoy muy contenta de poder participar de las elecciones, porque me parece una buena forma de seguir con la tradición que ejercieron durante muchos años mis abuelos desde aquí”.

Por otra parte, aunque criticó el sistema actual que obliga a rogar el voto porque en las elecciones anteriores no pudo participar a pesar de haberlo solicitado ya que las papeletas no le llegaron a tiempo, destacó que la posibilidad de poder hacerlo a partir de estas elecciones por correo electrónico fue un avance. “Eso agilizó mucho todo el proceso”, añadió.

Con mucha alegría y orgullo, Claudia Ronco, nieta de emigrantes zamoranos, explicó que era la primera vez que votaba como ciudadana española ya que obtuvo la nacionalidad hace poco más de un año gracias a la Ley de Memoria Histórica.

“Estoy muy empapada con todo lo que es la política española, así que creo que con mi voto estoy contribuyendo a mi país”, indicó, y destacó: “Hice mi ruego por internet y a los quince días me llegaron todas las papeletas”, calificando como “perfecto” el funcionamiento de la nueva opción disponible para rogar el voto.

También coincidió en este último punto Alicia Graciela Guerra González, nieta de emigrantes oriundos de las provincias de Palencia y Burgos, quien expresó: “Esta es la primera vez que voto para España porque obtuve la nacionalidad hace muy poco. Me encanta participar de todos los procesos electorales, tanto en España como en Argentina”.

Liliana Ramos, cuyos abuelos emigraron desde Salamanca, vivió durante muchos años en España y todavía mantiene vivo su deseo de retornar a la tierra de sus antepasados, apuntó: “Siento que es muy importante ejercer mi derecho como ciudadana española, porque quiero un gran cambio para mi país y creo que se puede lograr en estas elecciones”.

José Ignacio Herrero, un joven de 31 años que emigró desde Madrid cuando tenía 24, fue muy crítico con el sistema actual que rige a la Loreg. “Que sean tan sólo poco más de cuatro mil las personas que han pedido el voto desde Argentina es muy desalentador, porque si queremos un verdadero cambio para España lo mejor que podemos hacer quienes estamos en el exterior es tener una mayor participación”, analizó.

Herrero señaló que solicitó su voto por fax a la Junta Electoral de Madrid. “Por suerte me enviaron toda la documentación en tiempo y forma”, explicó, aunque volvió a machacar sobre la necesidad de derogar la última reforma a la Loreg ya que “más que facilitar la participación, la obstruye e imposibilita, haciéndonos sentir a los españoles que residimos en el exterior como ciudadanos de segunda categoría”.

Uruguay

Con la presencia de delegados de Podemos y del PSOE finalizaron las jornadas de depósito del voto en el Consulado de Montevideo, donde se habían rogado 762 votos para estas elecciones, contabilizándose un total de 577 sufragios, de los cuales 403 vinieron por correo uruguayo y 174 fueron presenciales, informa Manuel L. Faraldo.

Estas cifras destacan positivamente el reparto de los votos, ya que solamente el 25% de los mismos no habría llegado a sus destinatarios o los electores no tuvieron tiempo de depositarlo en el correo o llevarlo al consulado en el barrio de Pocitos de Montevideo.

La nota negativa es que menos del 5% fueron los que rogaron el voto demostrando así un desinterés por la elección ya que el Partido Socialista se puede decir que llegó a casi todos los electores con visitas previas al plazo para rogar el voto.

Miguel Ángel Suárez, montevideano hijo de madrileños, fue uno de los nueve de esa Comunidad que depositó su voto en el Consulado. Explicó que lo había solicitado por internet y señaló que “es difícil igualmente pedirlo por la web máxime que no todos saben manejarlo”.

Otro votante fue Fernando Jaime, pero esta vez su sobre iba dirigido a la Junta Electoral de Valencia, ya que es hijo de valenciano y gallega, pero está inscrito en donde nació su padre. También pidió el voto por internet y lo recibió a tiempo para votar en el Consulado.

Ana, que acudió con un embarazo a término, es más, tenía fecha para el mismo 20 de mayo, prefirió no ser fotografiada porque estaba muy nerviosa. “Es que no pensaba que podía llegar a votar, pero bueno llegué a hacerlo en el Consulado” aseguró mientras le explicaban qué llevaba cada uno de los sobres para que su voto no fuera anulado.

México y París

El viernes 22 de mayo a las cinco de la tarde en punto se cerraron las puertas del Consulado de España en México, después de tres días para el depósito del voto. Se contabilizaron los sufragios recibidos en urna, delante del cónsul general de España en México, Fernando Valderrama, así como de los representantes de los partidos políticos. El resultado: 72 votos en urna y 9 por correo, informa Begoña Ayuso.

Todos lamentaron lo sucedido y coincidieron en que el problema fundamental que hay que resolver urgentemente es la famosa ley del ‘voto rogado’ que ha provocado que los españoles en el exterior no puedan ejercer su derecho como debe ser. La mayoría de los españoles en México no recibieron los documentos a tiempo, ni los papeles para solicitar el voto, ni las papeletas, en su caso, para poder votar. De hecho, el mismo cónsul, y una parte del personal del Consulado pudieron votar “por un pelo”, ya que recibieron los documentos ese mismo día, es decir, el último para poder votar.

Un buen número de españoles se acercaron en estos días para expresar su malestar y descontento al no haber recibido los papeles a tiempo, señalando que esto los hizo sentir “ciudadanos de segunda”.

El número de electores inscritos en el CERA en enero de 2015 por parte de México, ascendía a 33.261, es decir, que ni el 1% pudo ejercer su derecho a elegir a sus autoridades.

Por parte del PSOE estuvo presente Josefina Tomé; del PP, Ángel Rodríguez y Sergio Ruiz y de Podemos, Palmira Mercadal y Sergio Ruiz.

En el Consulado de París había un total de 44.142 inscritos con derecho a voto en estas elecciones autonómicas. De ellos, 3.654 solicitaron la documentación para votar y finalmente ejercieron su derecho 2.805, es decir, el 76,7% de los que los pidieron.

Fueron 2.497 votos los que se recibieron por correo y 312 los que fueron depositados en urna en la sede del Consulado, informa Eduardo Cuña.

En Miami

El Partido Popular de España en EE.UU. estuvo presente en varios consulados mientras se celebraban las elecciones Autonómicas. Según relata el secretario general del PP en Estados Unidos, Juan José Núñez, las votaciones se llevaron a cabo con total normalidad y con la expectativa que una convocatoria electoral suscita en el exterior.

Afirma Núñez, que “en espera de cifras definitivas, la participación de los españoles que viven en el exterior no ha sido muy significativa en número de votos pero si en ilusión y en ganas de ejercer el derecho de elegir a nuestros representantes”.

Achaca esta baja participación al “complicado proceso del voto rogado que pone muchas trabas para que los españoles acudan a los consulados masivamente”.

En este sentido destaca que “son muchas las circunstancias que tienen que darse para que las papeletas de votación lleguen a los electores por lo que habría que revisar este proceso y hacer los cambios necesarios en las leyes para facilitar el proceso de los españoles que viven en el exterior”. En su opinión “el voto electrónico podría ser un paso importante para aumentar la participación”.

Núñez relata algunas anécdotas ocurridas en el Consulado de Miami, como que la de una chica que llevaba 15 años sin votar en ninguna elección a pesar de estar correctamente inscrita en el Consulado y que la última vez que le llegaron las papeletas de votación estaba viviendo en Siberia así que se quedó sin votar.

También destaca la presencia en el Consulado de Miami de una señora cubana de nacimiento que se le había olvidado el segundo certificado de inscripción en el CERA en su casa y, al no tener coche, tuvo que usar la combinación de varias ‘guaguas’ para ir a buscarlo y llegar a tiempo antes de que cerrara el Consulado el viernes a las cinco de la tarde. La señora llegó a tiempo y estaba muy contenta por haber votado.

También destacó el caso del ciudadano que no sabía nada de política pero que había votado a un candidato en su Comunidad Autónoma porque tenía su mismo apellido pero sin saber ni de qué partido era. O la anécdota de un mexicano de nacimiento que vino a votar con la camiseta de futbol de la Selección española para sentirse ese día más español. Y la gente que pedía que se le hicieran fotos mientras votaba para compartirlas en las redes sociales y así un largo número de anécdotas a lo largo de los tres días que se pudo votar en los consulados.

El representante del PP destaca que “hubo un número grande de ciudadanos a los que las papeletas no llegaron a tiempo y que no pudieron votar o algunos que se acercaron a los Consulados porque pensaban que las papeletas estarían en los Consulados y creían que el proceso para votar era el mismo que cuando votas en España”.

Por otra parte también resaltó “el alto número de incidencias en los votos recibidos por correo al no estar correctamente cumplimentados según las instrucciones remitidas en la documentación enviada a los ciudadanos”.

Para Núñez, “es un hecho que el proceso de votación de los españoles residentes en el exterior debería simplificarse con el objetivo fundamental de aumentar la participación de los españoles en el exterior en la elección de nuestros representantes”.