Llega a Caracas la exposición Memoria Gráfica de la Emigración Española

La muestra está instalada en la Hermandad Gallega de Venezuela hasta el próximo 5 de abril

El consejero de Empleo, Juan Santana, inició el acto de inauguración.

La exposición fotográfica itinerante Memoria Gráfica de la Emigración Española llegó a Venezuela y fue inaugurada el pasado viernes 13 de marzo en el salón principal de la Hermandad Gallega de Venezuela, en Caracas, donde permanecerá hasta el próximo 5 de abril y podrá ser visitada por todos los españoles que se acerquen a la sede de Maripérez en Caracas de dicha entidad.

El consejero de Empleo y Seguridad Social de la Embajada de España en Venezuela, Juan Santana Reyes, informó que la misma también será llevada a otras regiones del país. En el acto de apertura resaltó el interés de la Dirección General de Migraciones, la Consejería a su cargo, embajada, centros y asociaciones del exterior, en la promoción educativa, cultural y laboral de los españoles residentes en el extranjero.

«Esta exposición quiere contribuir a dar a conocer en forma de imágenes la realidad de la emigración que tan descarnadamente han recogido las cámaras fotográficas de distintas épocas. La reconstrucción de esta memoria no responde tan solo a un legitimo y necesario afán histórico grafico sino que representa también una oportunidad para que nos reconozcamos en nuestra propia identidad colectiva».

Consideró ineludible recordar que «más de 2 millones de ciudadanos españoles siguen residiendo fuera de nuestras fronteras, aunándose a la llamada vieja emigración la nueva emigración del inicio del siglo XXI”.

En el acto de inauguración estuvieron presentes los directivos de la Hermandad Gallega de Venezuela, representantes de la Embajada de España y el Consulado General, así como presidentes de centros y asociaciones de emigrantes residentes en Venezuela.

Intervención del historiador Rafael Arráiz

Todos los presentes destacaron lo acertado de escoger al historiador venezolano Rafael Arráiz Lucca como invitado de honor, quien disertó sobre el tema principal de la muestra fotográfica.

Es de resaltar que la población española se afincó en el territorio que hoy es Venezuela desde el tercer viaje de Cristóbal Colón en 1498. Y como escribiera el intelectual Arturo Uslar Pietri, en algo más de 50 años los españoles plantaron ciudades, establecieron jurisdicciones, marcaron la ley, la lengua y la religión y puntualizaba: “Lo primero que asombra es la voluntad de fundación y de permanencia”.

Arráiz Lucca se refirió a los sucesivos contingentes que llegaron al territorio, especialmente sevillanos, extremeños, canarios, gallegos, y en menor cantidad  vascos,  catalanes y de otras provincias. Pero advirtió que de inmigración española como tal  sólo puede hablarse a partir de la independencia del país, en 1830. De hecho, Venezuela era solamente una de seis provincias que dependían de España  hasta 1777 cuando fue constituida la Capitanía General de Venezuela, integrando en una sola unidad política a Caracas, Guayana, Maracaibo, Margarita y Trinidad.

“En el siglo XIX había un contingente importante de canarios y gallegos, pero la gran inmigración española a Venezuela ocurrió durante el siglo XX. Cuando cae la dictadura de Pérez Jiménez el 23 de enero de 1958, en Venezuela viven 7 millones de habitantes, y de esos, 1.500.000 han llegado en los 20 años anteriores. Es una cifra muy alta, pues estamos hablando de casi el 20% del país. Son inmigrantes portugueses, en su mayoría de Madeira; italianos, mayormente  de los pueblos del sur; y españoles de distintas procedencias”, dijo el Rafael Arráiz Lucca.

El conferenciante señaló que para que se diera tan inusual contingente de emigrantes se aunaron varios factores. En el caso de los españoles les movió la precariedad en que quedó España después de la guerra civil “y Venezuela seguía siendo un país despoblado, con muy pocos niveles profesionales para la época y con un ingreso petrolero muy alto”. Como ejemplo señaló que “ya en la década de los años 50 en Venezuela se están sacando 2 millones de barriles diarios y estamos hablando de una población q no llega a los 7 millones de habitantes. En esa década su ingreso per capita era mayor que casi todos los países europeos, mayor que todos los países latinoamericanos, aunque por supuesto menor que los EEUU”.

“Venezuela resultaba un destino atractivo porque además es un país históricamente abierto a los inmigrantes. No puede entenderse el país sin el concurso de los inmigrantes españoles, italianos y portugueses. La ciudad moderna de Caracas que fue un modelo universal durante los años 50 y 60 no se hubiera podido construir sin la participación de los inmigrantes.  Y esos los venezolanos lo sabemos, lo reconocemos y lo celebramos», recalcó Arráiz.