LA ENTREVISTA

“En Cuba ya se aprobaron 75.800 expedientes de nacionalidad de las más de 192.000 solicitudes y todavía hay pendientes más de 106.000”

Iago Losada Maseda, responsable del Registro Civil Consular de La Habana

El cónsul Iago Losada Maseda en la oficina que atiende el tema de la nacionalidad, ubicada en el Edificio de la Lonja del Comercio en el Centro Histórico de la capital cubana.

El 1 de agosto de 2011 asumió la dirección del Registro Civil Consular de La Habana el cónsul Iago Losada Maseda que en esta entrevista repasa los datos y el exigente trabajo que ha desarrollado la oficina diplomática para atender la gran demanda de acceso a la nacionalidad.

-¿Cuáles son los principales datos actualizados que se desprenden de la aplicación y tramitación de la Ley de Memoria Histórica?

-Hasta el día 11 de abril de 2013 han sido aprobados un total de 75.800 expedientes de nacionalidad española, de las más de 192.000 solicitudes que se realizaron en Cuba al amparo de la Ley de Memoria Histórica. Han sido denegadas 9.918, quedando pendientes en alguna de las diferentes fases de tramitación 106.412 expedientes.

Para tener una idea de la magnitud del trabajo que se está realizando, y solamente en el tema de los expedientes resueltos, la cifra es de alrededor de 1000 mensuales. Podemos poner como ejemplo el pasado mes de marzo, en que fueron aprobados 819 expedientes, denegados 230 y se practicaron más de 1.000 inscripciones en el Registro Civil.

Como consecuencia de lo anterior se ha producido un aumento significativo en las demandas de otros servicios que presta el Consulado General. Así, en 2011 se expidieron 18.401 pasaportes; en 2012, 12.712 y 2.400 en los meses de enero y febrero de 2013.

En el Registro Civil Consular se atienden unos 4.700 casos de inscripción de menores por año, ofertándose actualmente turnos para finales de 2014, y en la Sección de Matrimonios se están atendiendo unos 5.000 por año, con turnos para finales de 2013. Además, el número de inscritos en el Registro de Matrícula Consular se ha incrementado en más del doble al pasar de los 44.000 españoles inscritos en Cuba antes de la Ley de Memoria Histórica, hasta los 100.600 registrados hasta febrero de este año.

-¿Todo este trabajo habrá supuesto una enorme presión para el Consulado?

-Es muy importante resaltar el hecho de que, a pesar de la situación económica que está afrontando en estos momentos España, dentro del esfuerzo colectivo que se está haciendo en España por superar los efectos de esta crisis, el Consulado General de España en Cuba ha intentado mantener, dentro de las posibilidades que la contratación de personal ha permitido, el máximo esfuerzo; tanto en la tramitación de todos estos expedientes pendientes como, sobre todo, en la atención de las necesidades de esos más de 100.000 españoles que ahora mismo figuran en el Registro de Matrícula Consular. Yo creo que eso es muy importante, destacar el esfuerzo que eso supone para la Administración del Estado en el exterior , tanto desde el punto de vista económico, como desde el punto de vista profesional y personal, y que desde luego se hace con el mayor de los intereses por parte de todos los funcionarios, tanto fijos como contratados, para dar el mejor servicio posible a los españoles inscritos.

-¿Cuentan con los medios humanos y materiales adecuados?

-A pesar del esfuerzo que suponen las necesidades de ahorro en la administración tanto central como en el exterior, evidentemente que el número de personal que tenemos en estos momentos es inferior al que hubo en su momento. Pero lo que está claro es que ese personal está absolutamente comprometido dentro de las posibilidades materiales y laborales, a hacer el máximo esfuerzo para tratar de avanzar con la mayor seguridad y también con la mayor eficacia posible en la resolución de todos estos expedientes.

-¿Y cómo es la comunicación y la relación con las colectividades de españoles que residen fuera de La Habana?

-Nosotros utilizamos todas las vías posibles para comunicarnos con los interesados. Y quiero destacar aquí que la labor de los tres viceconsulados honorarios, tanto el de Santa Clara, como el de Camagüey y el de Santiago de Cuba, ha sido fundamental para poder llevar a cabo la aplicación de la Ley de Memoria Histórica porque nos ha permitido mantener un contacto fluido con el interior del país, desde el extremo más oriental hasta el extremo más occidental. Somos muy conscientes de que debemos de hacer un esfuerzo muy especial por atender las necesidades de la población en el oriente cubano.

-¿Ha habido alguna actuación reciente en este sentido?

-En el pasado mes de febrero se realizó un viaje, aprovechando el desplazamiento del embajador, para atender cuestiones consulares en los viceconsulados de Camagüey y de Santiago de Cuba. En ese viaje se atendió a un número elevado de españoles que por determinada circunstancia no podían desplazarse a La Habana, sobre todo personas muy enfermas o muy mayores, y se les facilitó la posibilidad de firmar determinados documentos, que únicamente podían ser firmados en la presencia de los Cónsules. Creo que fue un viaje muy enriquecedor, desde el punto de vista de nuestra labor, para conocer la realidad del oriente y también muy positivo para todos los ciudadanos que querían ejercer sus derechos desde el punto de vista de la nacionalidad y que por sus circunstancias personales no podían trasladarse hasta La Habana.

-¿Cuándo se resolverán los expedientes pendientes?

“Es muy difícil dar un plazo sobre cuánto tarda un expediente en ser resuelto, fundamentalmente porque todo dependerá del nivel de documentación que tiene ese expediente, y a una gran cantidad de esos más de 106.000 expedientes que están en trámites les faltaba parte de la documentación que tenía que ser requerida posteriormente lo cual provoca las subsiguientes demoras o incluso con la documentación aportada necesita otros requerimientos para poder aclarar diferentes aspectos que pueda tener ese expediente, lo cual produce las consecuentes demoras. Además, como se requiere localizar partidas de nacimiento o de bautismo en España se producen retrasos porque, o bien no encuentran esas partidas, o bien los solicitantes no localizan el lugar donde está inscrito ese antepasado.

-¿Qué supone para usted formar parte parte del cuerpo diplomático española en Cuba?

-Para mi es un gran orgullo poder servir a España y a los españoles donde quiera que estén, tanto a aquellos que tuvieron que abandonar España hace años como a los que, por cualquier circunstancia, se encuentran aquí en Cuba. Creo que es muy importante destacar que todo el personal del Consulado está haciendo el máximo esfuerzo por dar una atención del mayor nivel posible a una comunidad española residente en Cuba que no para de aumentar, y que demanda servicios que queremos ofrecer con la máxima eficacia y con la mayor calidad posible.