En su primera visita oficial a México e Iberoamérica como Jefe del Gobierno español y tras una ardua jornada de trabajo en Puerto Vallarta, Jalisco, en donde sostuvo varios encuentros con mandatarios latinoamericanos, el presidente de España, Mariano Rajoy se reunió por la tarde en la Ciudad de México con un grupo de personalidades de la colonia española.
La recepción tuvo lugar en la Residencia de la Embajada de España en punto de las 19:00 hrs, a donde los invitados -alrededor de 300- llegaron puntuales, en medio de una tarde lluviosa. Allí, fueron recibidos por el Embajador de España en México, Manuel Alabart y su esposa, así como el Cónsul General de España en México, Miguel Ángel Fernández de Mazarambroz.
Mariano Rajoy llegó acompañado de Alberto Núñez Feijóo, presidente de la Xunta de Galicia. Lo primero que hizo fue firmar el libro de visitas especiales -una mesa redonda de mármol, que llamó la atención del presidente del Gobierno español- en donde se observan las firmas de los Príncipes de Asturias, doña Letizia y don Felipe, entre otros.
Minutos después el Presidente de Gobierno, tras saludar al cuerpo diplomático, dirigió unas palabras a un público conformado por empresarios, directivos de centros españoles y agrupaciones de residentes en el exterior. Y tuvo palabras para todos, en primer lugar a los miembros del Consejo de Residentes Españoles en México, “que velan por los intereses de nuestros compatriotas que viven y trabajan en este país”; a los diversos centros españoles y casa regionales, desde las más antiguas hasta las más recientes, por “su importante labor de seguir conservando la identidad de los españoles emigrados a México, proporcionándoles a su vez, apoyo en los momentos de dificultad”.
A los empresarios les agradeció el impulso que dan a la fructífera relación que hay entre México y España. Y a los cooperantes su ejemplo de compromiso y solidaridad. Resaltó, en general, la importante labor de los españoles emigrantes en diversos ámbitos de la sociedad mexicana.
“A lo largo de la historia, esto hay que decirlo porque es verdad, México ha abierto sus puertas a nuestros compatriotas con generosidad. Les ha brindado una vida mejor y con mayores oportunidades en momentos muchas veces muy complicados para nuestro país”, afirmó el mandatario español, recalcando la “deuda de gratitud que los españoles tenemos con los mexicanos”, dijo.
Habló claro de la crisis
“España vive hoy momentos de extrema dificultad, hay que reconocerlo porque la mejor manera de resolver un problema es reconociendo que existe, y no mirando hacia otro lado…”, dijo el mandatario.
Y lo explicó así: “Hay muchos españoles que quieren trabajar y no pueden hacerlo, sobre todo jóvenes, se ha perdido nivel de vida, nuestro crecimiento económico va a ser negativo este año, hemos pasado unos años difíciles, pero de la misma manera que os digo esto, también os digo que hay una voluntad decidida por parte del Gobierno de España de tomar las decisiones que debe y muchas más que tomará esta misma semana – cuando el Consejo de Ministros de luz verde a ciertas reformas – que a nadie le gusta tomar pero que son absolutamente imprescindibles y necesarias si queremos sentar las bases y los cimientos para una nueva etapa para España de crecimiento sostenible y estable”.
Rajoy se refirió a las dificultades que prevalecen en la zona euro, y a los numerosos factores que condicionan la política. Y señaló que, “estamos obligados a no gastar por encima de nuestras posibilidades, el año pasado gastamos 90 mil millones de euros más de lo que ingresamos por las administraciones públicas, o sea 15 billones de las antiguas pesetas y ese dinero hay que pedirlo, te lo pueden dar o no, a unos precios u a otros…” Y señaló que es necesario generar confianza, sanear las administraciones públicas y hacer que cumplan su función capital que es ayudar a que la gente pueda generar riqueza, bienestar y atender a los españoles en situaciones de dificultad.”
El presidente del Gobierno español terminó su discurso con un mensaje esperanzador: “Así como os he dicho la verdad, también os quiero decir que este país va a salir adelante porque hemos pasado muchas dificultades a lo largo de la historia, pero al final España ha demostrado que tiene el capital más importante que se precisa para abordar los grandes retos, y ese capital se llama españoles.”
Posteriormente, Mariano Rajoy convivió por más de dos horas con los asistentes, con quienes se tomó fotografías y compartió puntos de vista.