Pilar Pin se une a quienes reclaman el voto electrónico para los españoles que viven en el extranjero

"Los plazos marcados por la ley son suficientes para Europa pero no para los residentes en América", afirmó la directora general de la Ciudadanía Española en el Exterior

La directora de la Ciudadanía Española en el Exterior, Pilar Pin.

El Gobierno español reconoce que la participación de la comunidad emigrante en las elecciones de este domingo es «muy insuficiente», como afirma la directora general de Ciudadanía Española en el Exterior del Ministerio de Trabajo e Inmigración, Pilar Pin.

En declaraciones a Efe, Pin admite que la reforma legal ha causado «malestar y rebeldía» en los emigrantes que marcharon de España hace décadas, en sus hijos y nietos que se han nacionalizado y en quienes se han mudado al extranjero en los últimos años por cuestiones laborales o personales.

La directora general asume que la instauración del voto rogado les ha desincentivado.

«El procedimiento de voto es complicado», admite Pin, quien recuerda que la ley «la hizo el Parlamento, no el Gobierno».

Lamenta que no se hayan introducido fórmulas para que los electores reciban a tiempo las papeletas por correo después de ‘rogarlas’.

Tuvieron de plazo hasta el pasado 22 de octubre para comunicar por correspondencia o fax su deseo de votar.

A los que les ha llegado la documentación, tienen de margen hasta el día 19 para mandarla a las oficinas consulares. Si el matasellos es posterior, el voto no será válido.

Este proceso implica un alto grado de dependencia de servicios de correos que no son tan eficientes como el de España, en especial, en lugares de América Latina, donde una carta puede tardar semanas en llegar a su destino.

«Los plazos marcados por la ley son suficientes en Europa, pero no en países de América. El Gobierno se ve incapaz de articular el funcionamiento de los sistemas de correos de cada país», apunta Pin.

Pin cree que la solución pasa por la implantación del voto electrónico con las garantías adecuadas. «Hay que cambiar la mentalidad», aconseja. Esta misma propuesta la realizó el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, hace pocos días.

Aunque la reforma legal aprobada en enero de este año tuvo un amplio respaldo, los dos partidos mayoritarios en España (el Partido Socialista y el Partido Popular) no están satisfechos de sus efectos.

Una de las opciones para estimular el voto exterior es crear una circunscripción específica en el Senado para los emigrantes, cuyo voto computa ahora en la provincia en la que están inscritos.