En el acto estuvieron representantes de varias instituciones, además del consejero de Empleo y Seguridad Social, Emilio Díaz Arce, y el delegado de la Xunta de Galicia en el Río de la Plata, Alejandro López Dobarro.
También acudieron una treintena de emigrantes acompañados, durante todo el acto, por el sonido de las gaitas y las actuaciones de las bailarinas de Casa de Galicia, junto a la banda de música de la Armada uruguaya.
El discurso principal corrió a cargo del presidente de la Federación de Sociedades Gallegas, Román Nogueira, que puntualizó que “el cierre del mes de Santiago Apóstol lo hacemos frente al mar que, si bien separa a las dos tierras, también las ha unido en el pasado con los viajes de la diáspora gallega”.
Aseguró también que “aquí trabajamos honradamente y formamos familias, pero sin olvidar nuestras raíces. Sigamos por este camino amigos, ojalá que el futuro nos encuentre con los mismos sentimientos por los que lucharon nuestros antecesores, ojalá seamos correctos merecedores de aquellos emigrantes que vinieron cargados de ilusiones, honradez y trabajo” culminó Nogueira.
A continuación, tuvo lugar la celebración de la misa oficiada en gallego en la Catedral Metropolitana de Montevideo y la entonación del himno de ‘Os Pinos’.
Este acto estuvo a cargo del padre Aurelio Vázquez, como desde hace décadas, y fue organizada por el Patronato da Cultura Galega que preside José Otero.
En ella se contó con la presencia de las autoridades que acudieron a la ofrenda en la plaza, además de casi dos centenares de feligreses y emigrantes. Uno de ellos, emocionado al escuchar al padre Aurelio, confesó que “estaba emocionado porque aquí no se habla más gallego”.
Cabe destacar que también el coro del Patronato cantó en la lengua de Rosalía y a través de la música que llenó la Catedral, todos los participantes se sintiern transportados a la tierra donde reposa el apóstol Santiago.