La Diputación de León anuncia la llegada de los beneficiarios de los programas Añoranza y Raíces para el 14 de septiembre

Marcos Martínez recibió de Raúl Parrado un libro de condolencias por el fallecimiento de Isabel Carrasco y la Medalla de Oro de la comunidad leonesa en la isla caribeña

El presidente de la Colonia Leonesa en Cuba, Raúl Parrado, muestra unos documentos al titular de la Diputación, Marcos Martínez.

 En los últimos años, ha recibido subvenciones por importe de 37.000 euros.
Además, también la Colonia Leonesa es beneficiaria de los programas Añoranza y Raíces puestos en marcha por la institución provincial. El próximo día 14 de septiembre llegarán cinco emigrantes procedentes de Cuba dentro de Añoranza y cuatro jóvenes descendientes de leoneses dentro del programa Raíces.
Pero el recibimiento no se quedó en un mero encuentro institucional, Marcos Martínez hizo entrega a los miembros de la Colonia de un cuadro conmemorativo de su centenario y del último número publicado en la Colección Breviarios de la Calle del Pez, que coordinado y dirigido por los escritores leoneses Luís Mateo Díez, José Mª Merino y Juan Pedro Aparicio, se ha editado este mes de julio con motivo del centenario de la Colonia Leonesa en Cuba. Está dedicado a narrar la vida del jesuita leonés Mariano Gutiérrez-Lanza, quien nació en 1865 en Pardavé de Torío y que fue trasladado a Cuba en 1891.
La vida de Gutiérrez-Lanza
Allí, en el Colegio de Belén de La Habana desarrolló una intensa labor como profesor, pero lo más destacado de su biografía es su intenso y valorado trabajo como meteorólogo en el Observatorio Astronómico, que poseía por entonces los mejores equipos para esta ciencia. Llegó a ser el director de dicho Observatorio y, debido a su creciente prestigio, fue nombrado miembro de la Academia de Ciencias Médicas, Físicas y Naturales de Cuba en 1915.
Fueron muy famosas las ponencias y conferencias expuestas por el padre Gutiérrez-Lanza. A sus aciertos y buen hacer se debe la predicción de distintos y famosos huracanes que asolaron la isla de Cuba en la primera mitad del siglo XX, que lograron alertar a la población con la antelación suficiente para abandonar a tiempo las zonas más peligrosas.
El libro recoge también la historia del famoso avión español ‘Cuatro Vientos’, que viajó con dos pilotos desde Sevilla hasta La Habana en 1933 con total éxito, siendo toda una hazaña en su época y basándose en las predicciones meteorológicas que habían sido enviadas por el padre Gutiérrez-Lanza desde La Habana.
Este tuvo la oportunidad de conocer y felicitar a los valientes pilotos españoles y de ser testigo de los numerosos homenajes que en La Habana se les rindieron. Aunque, quiso la mala fortuna que el avión continuara días después su viaje hacia Méjico, sin la intervención del padre Gutiérrez-Lanza en la elaboración de las predicciones meteorológicas para este tramo, y desgraciadamente desapareciera el aparato y sus dos valientes pilotos sin llegar a su destino. Resulta particularmente emotiva la correspondencia cruzada por el padre jesuita con el Ejército español sobre este vuelo del Cuatro Vientos, cuyo 75 aniversario fue conmemorado recientemente.
Por su parte, la Colonia Leonesa entregó al presidente de la institución provincial la Medalla de Oro de la entidad a la Diputación, por su colaboración, y un libro de condolencias recogidas tras el fallecimiento de Isabel Carrasco, donde se plasma el pésame de más de medio millar de leoneses residentes en Cuba.