El Hogar Centro Castellano y Leonés de Catalunya concedió los premios de su 28º Certamen de Poesía

Se impuso Filo Tardío Izquierdo, de Vilasar de Mar (Barcelona), con su obra Cinco sentidos

Directivos del Hogar y el jurado aplauden a uno de los ganadores.
Los poemas galardonados se recitaron por sus autores o por personas presentes en el salón de actos.
Los miembros del jurado.

Se ha celebrado la vigésimo octava edición del Certamen de Poesía que anualmente convoca el Hogar Centro Castellano y Leonés de Catalunya dentro de los actos de exaltación del Día de la Comunidad de Castilla y León.
Como el pasado año, los trabajos llegaron desde diferentes puntos de toda España con un elevado nivel que hizo trabajar en firme al jurado para poder seleccionar la obras ganadoras.
El primer premio fue para Filo Tardío Izquierdo, de Vilasar de Mar (Barcelona), con el título Cinco sentidos. El segundo premio fue para Isabel García, de Jaca (Huesca), por la obra Las perspectivas del tiempo, y el tercero para Héctor D. Emperador, de Barcelona, con Depredadores hipócritas.
Los accésit correspondieron a Los inviernos de mi infancia de Josefina Ruiz, de Barcelona, el primero; a Soledad de Aurora Galicia Jané, de Barcelona, el segundo; y a De tal palo tal astilla, de Yolanda de las Heras, de Castellbisbal (Barcelona), el tercero.
En cada uno de los premios, el jurado fue dando las pertinentes explicaciones del porqué se eligió cada una de las obras, algo que fue muy didáctico y clarificador. Los poemas galardonados se recitaron por sus autores o por personas presentes en el salón de actos en caso de ausencia de los mismos. Una vez repartidos los premios, se inició una velada poética con los rapsodas del Grupo de Poetas del Hogar, acompañados por poetas asiduos del Centro.
Según informan desde la propia entidad, “no hay ninguna duda que ha sido una de las mejores veladas que se recuerdan, y es que todos rayaron a gran altura, pareciendo que las musas Calíope, Erato o Talía se habían aliado con todos los que pasaban por el escenario, hasta con el presentador, que hizo gala de su fino sentido del humor improvisando pareados y chascarrillos sobre la marcha. Claro que la ‘mejor nota’ la puso el guitarrista Juan Guerrero, que -aparte de acompañar a las poesías- dio un recital de obras clásicas como la del ‘camprodoní’ y español universal, Isaac Albéniz, con la obra Asturias, de su Suite Española Op. 47, entre otras piezas”.
Una reposición de fuerzas a base de jamón y embutido de Tierra de Sabor, bien regado con algunos de los afamados caldos de Castilla y León, pusieron fin a una jornada para enmarcar.