La torrencial lluvia que cayó implacablemente sin pausa durante toda la jornada del domingo 10 de septiembre en Montevideo, no fue obstáculo para que el Centro Asturiano Casa de Asturias del Uruguay, con su extenso nombre tras la fusión de las dos instituciones de la colectividad asturiana, festejara los 107 años de la institucionalidad del colectivo astur.
La fundación en 1910 del Centro Asturiano del Uruguay reunió en esta institución a los emigrantes que llegaron a Uruguay. Pasado el tiempo sufrió la escisión de buena parte de ellos, allá por 1939, cuando, por razones políticas como consecuencia de la guerra civil española, crean el club Casa de Asturias en una nueva sede. En 2001 las aguas se vuelven a calmar y se logra, tras años de negociaciones, unificar a la colonia asturiana en una sola institución que es la que actualmente reúne a toda la familia asturiana en Uruguay.
Igualmente mantiene las dos sedes, una céntrica en la calle Mercedes (antigua Casa de Asturias) y la otra en la avenida Joaquín Suárez, zona del Prado, desarrollando actividades en ambas.
La conmemoración de la unidad institucional asturiana, fiesta principal coincidente con la Festividad de la Virgen de Covadonga, tiene lugar siempre en la última sede citada, donde reina el amplio patio trasero una cueva con una imagen de la patrona de Asturias.
La convocatoria es una cita de honor para todo el colectivo que tiene como causa y efecto un lleno total, unas seiscientas personas que abarrotaron el amplio salón de fiestas.
Los actos comenzaron en la mañana con una misa solemne y procesión, conmemorando la Festividad de la Virgen de Covadonga. Culminada la misma, se ofreció una recepción a las autoridades en el Hórreo, típica construcción asturiana, icono tradicional construido en la sede social que evoca en los emigrantes su tierra de origen.
Entre los principales invitados se encontraban las autoridades diplomáticas españolas, el cónsul general, José Rodríguez Moyano, el encargado de negocios, Ignacio Aguirre de Cárcer, el consejero de Empleo y Seguridad Social, Benito Díez Arce, el presidente de la Federación de Instituciones Españolas del Uruguay, Jorge Torres Cantalapiedra, el presidente del Hogar Español, Ángel Domínguez, el presidente de la Asociación Española, Gerardo Garcia, y su gerente general, Julio Martínez, el presidente de Casa de Galicia, Manuel Ramos, el presidente de Cambadu, Mario Menéndez, además de presidentes y directivos de instituciones de la colectividad española.
Luego de escuchar los himnos patrios de Uruguay, España y Asturias, el presidente de la entidad, José María Pérez, dio la bienvenida a todos los presentes, señalando la importancia de la fecha y agradeció el apoyo en un día tan especial a pesar de las inclemencias climáticas. Con similares conceptos cerró la oratoria el cónsul general, José Rodríguez Moyano, agregando que está a disposición en la oficina consular para todo el colectivo español.
No faltó la fabada
El imán de enganche para que muchos no faltaran a la cita, a pesar de la lluvia, fue el plato estrella, la tradicional fabada asturiana, elaborada por manos expertas con todos sus ingredientes, servida con abundancia por los socios y directivos que colaboran con eficiencia y diligentemente, dejando satisfechos a los exigentes comensales.
La fiesta culminó alegremente a los sones de la orquesta De Elit y discoteca hasta languidecer la tarde.