Mañueco presenta la tarjeta sanitaria para los castellanos y leoneses residentes en el extranjero

El consejero destaca que más de 113.000 emigrantes podrán solicitarla a finales del mes de enero

Foto de familia de los participantes en el Encuentro con las autoridades.
Una vista de la conferencia inaugural a cargo de Juan Andrés Blanco, director de la UNED de Zamora.

Fernández Mañueco fue el encargado de inaugurar el Encuentro y anunció la puesta en marcha de la tarjeta sanitaria, que previamente había explicado en un encuentro con los medios de comunicación acompañado por el director general de Asistencia Sanitaria de la Junta, José María Pino. Con esta medida, se extienden a los emigrantes residentes en el extranjero “los beneficios de la Sanidad de Castilla y León en sus estancias temporales” en la Comunidad, destacó el consejero de Interior. Y añadió que es una gran noticia para el colectivo: “Va a ser un avance para los ciudadanos de Castilla y León que viven fuera de nuestras fronteras”.

Los potenciales beneficiarios de la adquisición de la Tarjeta Salud son aquellas personas de Castilla y León que residen en el extranjero y posean el certificado de inscripción en el Padrón de Españoles Residentes en el Extranjero o certificado de alta en el registro de matrícula consular. Así, Mañueco cifró en 113.000 las personas a las que se garantizará la cobertura sanitaria.

La Tarjeta se podrá solicitar a partir de finales del próximo mes de enero, con independencia de que el futuro usuario disponga de otros sistema de cobertura sanitaria válidos para todo el territorio nacional, según aclaró la Junta. El documento tendrá una caducidad de 10 años, pero su validez estará vinculada a la efectiva activación de la misma, que coincidirá con el periodo previsto de estancia temporal en Castilla y León.

El consejero de Interior se refirió en su encuentro con los medios a dos “cuestiones prioritarias para la Junta”: la nacionalidad para los descendientes de emigrantes y el voto en urna. “Hay que extender la nacionalidad y los beneficios de la nacionalidad a todos los descendientes de los españoles, no sólo a algunos”, afirmó y acusó al Gobierno de Zapatero de hacer una versión limitada del acceso a la ciudadanía española con la última reforma.

Y apostó por una modificación de la participación electoral. “Pedimos que las votaciones de los ciudadanos residentes en el exterior se hagan con voto en urna independientemente del país de residencia, consideramos que es algo fundamental para garantizar la transparencia y la seguridad de los procesos electorales”, concluyó Mañueco.