En los anales históricos de la también conocida como Octava Villa de Cuba, aparece la presencia canaria desde hace más de cuatro siglos, y de ahí la importancia de no perder esa huella, dejada a fuerza de trabajo y voluntad por los emigrantes de las Islas. De todo lo anterior se habló en este último encuentro del año, al tiempo que igualmente fueron abordados los retos actuales, como la necesidad de contar algún día con una sede permanente para la Asociación Canaria en Remedios, reclamo que se ha constituido en una asignatura pendiente.
Por otra parte, los integrantes de la Asociación Canaria de Cuba en la Ciudad Monumento mostraron interés por el nuevo sistema para el pago de las ayudas a los descendientes mayores de 80 años. En la festividad por la llegada de un nuevo año, no pudo faltar la décima jocosa y alegre, esta vez en voz del conocido repentista Joseíto Herrera, quien con su verbo veloz y divertido fue motivo de verdadero regocijo.