Exteriores confía que la nueva regulación rejuvenezca los CRE a través de la incorporación de las mujeres

El secretario de Asuntos Consulares no acepta que haya asociaciones que quieran reemplazar a los Consejos

Reunión abierta al público del CRE de Montevideo celebrada en octubre de 2009.

Consultado sobre las novedades más positivas para el funcionamiento de los CRE, Elorza destacó que en el presente sus miembros son personas que se han presentado para ser elegidos dos, tres o cuatro veces, y que llevan ahí 15 o 20 años. “El común de los miembros de los CRE tiene una edad bastante avanzada por lo que al forzar que el 40% sean mujeres, y sabiendo que las mujeres que tienen edad avanzada no se van a presentar, lo que esperamos es que se va a producir un importante rejuvenecimiento a través del elemento femenino”, puntualizó a España Exterior.

Por otra parte, Elorza destacó que los CRE eran muy contrarios a que “subiéramos la exigencia del número de personas para poder constituir uno, por eso se ha mantenido la regla de 700 -la actual- y, solo para nuevos CRE, se ha elevado esa cifra a 1.200 personas”. Además, señaló que se ha mantenido la regla de que si se presenta una lista hacen falta unos porcentajes mínimos, pero si se presentan dos no hay exigencias. Con estas medidas, explicó, lo que se quiere es que haya el máximo número de CRE posibles.
“Un juego inaceptable”
En este sentido, recordó que existen algunas asociaciones -especialmente en Europa- que en los últimos años han tenido la teoría, “totalmente descabellada”, según Elorza, de que ellos no aceptan la idea de “un voto-un hombre”, sino que pretenden que el Estado acepte a las asociaciones como interlocutoras. “Ellos no son intermediarios obligados para hablar con sus directores y sus miembros. Hemos visto una política de esas asociaciones para que no se constituyeran los CRE. En el presente, no hay en París, no hay en Londres, y eso es una pena”. Y definió esta situación como “un juego inaceptable”. Además, señaló Elorza, sin los CRE sería más difícil tener un buen Consejo General.

Para el secretario, los CRE son “interesantes”, primero para el cónsul y luego para poder extender planteamientos reivindicativos, transmitir información, etc. En su opinión, los CRE que funcionan bien consiguen comunicar informaciones a través de correos electrónicos, por ejemplo, logrando un buen servicio. “Hay una Subdirección General que se ocupa de los CRE donde nos piden ayuda para montar una página web y les damos 2.000, 3.000 o 4.000 euros para que la hagan, o les ayudamos a financiar alguna revista. Todo eso nos interesa dinamizarlo. El CRE es un elemento institucional para la comunicación y la mejor defensa de sus derechos”.