Cisneros acudió con buena parte de su familia para participar en las fiestas de la Virgen del Castillo, de las que pronunció el pregón poco después del homenaje. Antes, el empresario presentó en sociedad un libro de José Ángel Rodríguez sobre una saga salida del pueblo hace cuatro siglos hacia el nuevo mundo, los Ximénez de Cisneros, que luego vivieron entre Cuba, Venezuela o Miami.
Al acto público, que abarrotó el recientemente inaugurado centro cultural, asistieron diputados nacionales, procuradores autonómicos, alcaldes y diputados provinciales.
Para la alcaldesa, Rosa Aldea, se trató de brindar a Gustavo Cisneros “un acto deseado y esperado por el nexo de unión que mantiene orgulloso del pasado y de sus raíces, y que él y su familia representan”. Además, incidió en el interés por la historia personal y familiar y sobre la localidad que el empresario ha acrecentado en los últimos años, promoviendo dos publicaciones sobre las raíces de la villa y de la saga familiar Ximénez Cisneros.
El actual presidente de la Fundación Cisneros de Venezuela y del emporio empresarial ‘Organización Cisneros’ agradeció a los vecinos su trato. “Sobre todo por el generoso acto de reconocimiento por espléndido e inesperado y del que aún no salgo de mi asombro.