El soberanismo catalán se divide ante las elecciones y presenta candidaturas diferentes

Rajoy pide una participación masiva mientras Puigdemont sigue huido en Bélgica a la espera de extradición

José Manuel Maza, en Buenos Aires, en la última imagen suya horas antes de morir.

 Sin embargo, se ha producido la división de los soberanistas y el Partit Demòcrata de Catalunya (PDeCAT) -la antigua Convergència- y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) no van a repetir la coalición que presentaron a las anteriores elecciones del 27 de septiembre de 2015, con el nombre de Junts pel Sí.

La lucha por el liderazgo entre el expresident de la Generalitat, Carles Puigdemont (PDeCAT), y el exvicepresident, Oriol Junqueras (ERC), y las consecuentes desconfianzas llevaron a Esquerra al rechazo a una nueva coalición y a presentarse bajo sus propias siglas. No así la otra formación que renuncia a su nombre, muy marcado por los casos de corrupción de sus anteriores líderes Jordi Pujol y Artur Mas, que les ha llevado a perder la mayoría de su fuerza electoral.

Así Puigdemont se presenta a las autonómicas bajo la agrupación Junts per Catalunya (JxC), que incluye a los exconsellers de su cuerda que están en prisión o fugados con él a Bélgica, al expresidente de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) -también en prisión por su colaboración con los referendos ilegales- y otros representantes de la sociedad, reduciendo al mínimo la presencia del PDeCAT.

En la cárcel

Junqueras, por su parte, deslizó desde la cárcel la posibilidad de que la número 2 de ERC y de la lista electoral, Marta Rovira, sea la aspirante a la Presidencia de la Generalitat en vista de su situación procesal. También van en la candidatura varios exconsellers de Esquerra que están presos o huídos de la Justicia en Bélgica, a la espera de su entrega a la Justicia española.

Y es que tanto Puigdemont como cuatro exconsellers siguen en Bruselas, donde recibieron la visita y el apoyo de unos 200 alcaldes catalanes, mientras un juez decide qué responde a la orden de detención y extradición a España y a la solicitud de entrega de la Fiscalía belga por los cargos de sedición, rebelión, desobediencia y malversación de fondos. Sin embargo, la complicada tramitación y la opción de diferentes recursos permitiría a los fugados prolongar su estancia hasta el mes de enero.

Por su parte, Junqueras y siete exconsellers, así como el ya expresidente de la ANC y el presidente de Omnium Cultural permanecen en prisión en España bajo esos delitos por orden de la Audiencia Nacional. Se libraron la presidenta del Parlament catalán, Carme Forcadell, -aunque pasó una noche en la cárcel- y cuatro miembros de la Mesa de esa Cámara tras pagar sus respectivas fianzas después de acatar la Ley y el artículo 155 de la Constitución ante el Tribunal Supremo. Posteriormente se supo que Forcadell va en las listas de ERC. 

Las rectificaciones de los soberanistas fueron una constante de los últimos días, aunque parecen estrategia electoral o judicial. Sus líderes reconocieron su fracaso y que no estaban preparados para la desconexión de España u ofrecieron soluciones diferentes a la independencia.

Pero las movilizaciones permanecen, cada vez con menos personas. A raíz de las actuaciones judiciales y del Gobierno de España un sindicato minoritario e independentista convocó una huelga general en Cataluña el pasado 8 de noviembre, que tuvo un seguimiento mínimo pese que grupos de radicales bloquearon los trenes y carreteras, además de otros medios de transporte. También hubo el día 11 una marcha que pedía la liberación de los presos a la que no asistió Forcadell pero sí la alcaldesa de Barcelona y líder de Comú, Ada Colau. El independentismo, mientras, se ha convertido en la segunda mayor preocupación de los españoles, tras el paro. 

Las listas electorales

En cuanto a las elecciones del próximo 21 de diciembre, se hicieron oficiales las candidaturas, tras finalizar el plazo de presentación, y concurren 17 listas diferentes, seis más que en 2015. Además de Esquerra Republicana y de Junts per Catalunya, las principales formaciones que se presentan son Ciutadans-Partido de la Ciudadanía (C’s), el Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC-PSOE), el Partido Popular (PP), Catalunya En Comú-Podem y la Candidatura d’Unitat Popular (CUP).

Inés Arrimadas será de nuevo la cabeza de lista de Ciudadanos, el partido que mayor rendimiento saca en las encuestas a la situación producida tras la fallida e ilegal declaración de independencia del Parlament y por su apoyo a la actuación del Gobierno español. También repite Miquel Iceta como candidato socialista, con la novedad de que integra en su lista al exfiscal Carlos Jiménez Villarejo, exeurodiputado de Podemos, y a antiguos dirigentes de Unió y de CiU, como Ramón Espadaler, que era conseller de Interior cuando se celebró la consulta soberanista del 9 de noviembre de 2014.

Xavier García Albiol se mantiene como número 1 del PP, una fuerza que se está volcando para pedir una participación masiva. Así, el presidente del Gobierno y del partido, Mariano Rajoy, hizo un llamamiento a la mayoría silenciosa para reconstruir Cataluña, además de solicitar a las empresas que se queden (se han marchado más de 2.500 por el proceso soberanista) y el fin del boicot a los productos catalanes.

Polémicas

Como en el frente independentista, también hubo problemas en Podemos que cesó a su líder en Cataluña, Albano Dante Fachin, y rechazó repetir la candidatura de Catalunya Sí que es Pot, uniéndose a En Comú y con Xavier Domenech como candidato. Finalmente, la CUP cambia su cabeza de cartel, ahora será Carles Riera relegando a Anna Gabriel, y defendió su concurrencia a las elecciones, que había negado por activa y por pasiva, “para materializar la República”.

Por último, cabe reseñar dos polémicas que tendrán mayor recorrido. De un lado, las denuncias del Gobierno de España ante instancias europeas de las injerencias masivas en las redes sociales e internet con noticias falsas y montajes acusando a hackers de Rusia (el 50% de los ataques proceden de allí) y de Venezuela (un 30%). El Ejecutivo evitó señalar directamente a autoridades rusas. Y de otro lado, las acusaciones de la dirigente de ERC, Marta Rovira, al Gobierno por amenazar con muertes en las calles si seguía el proceso soberanista. Rajoy mostró su “absoluta vergüenza” por tal afirmación.

Muere el fiscal general del Estado

El fiscal general de Estado, José Manuel Maza, falleció el pasado 18 de noviembre en una clínica de Buenos Aires (Argentina), como consecuencia de una insuficiencia renal aguda. Maza, que el día 29 cumplía un año en el cargo, se encontraba en la capital argentina participando en la reunión de la Asociación Iberoamericana de Ministerios Públicos (Aiamp), que se celebró esa semana. Fue el responsable de las actuaciones judiciales del Estado contra los dirigentes soberanistas catalanes, que ha llevado a varios a la cárcel, otros están libres con cargos y algunos más con una orden de detención y extradición tras su huída a Bélgica.