El diputado del PPdeG, Miguel Santalices, afirmó el día 9 en el Parlamento gallego que desde su formación esperan “que el Gobierno de España apoye el sistema hospitalario de los españoles en el exterior. No de boquilla sino asumiendo deudas”. En este sentido recalcó que “la Xunta entiende que la asistencia sanitaria de los españoles en el exterior debe ser una prioridad del Gobierno central y se debe realizar en coordinación con las comunidades autónomas y con la elaboración de un plan a medio y largo plazo”.
Por eso, Santalices, ante una proposición no de ley presentada por el Bloque Nacionalista Galego (BNG) por la que se instaba a la Xunta de Galicia a mantener la Fundación Galicia Saúde, defendió la presentación de un texto alternativo por parte del PP en el que se insta a la Xunta de Galicia “a demandar del Gobierno central” que sufrague “la deuda originada por la modificación de los estatutos de la Fundación Galicia Saúde de manera que se saneen las cuentas del área hospitalaria de la Mutual Centro Gallego de Buenos Aires y que se mantenga la asistencia a los gallegos residentes en Argentina con las máximas cotas de calidad”.
El diputado del PPdeG defendió la decisión de extinguir la Fundación Galicia Saúde que fue tomada por la mayoría de los miembros de su Patronato. También afirmó que esta decisión se tomó en cumplimiento de la cláusula 65 del contrato de gestión del hospital firmado entre el Centro Gallego y la Fundación y que establece que dicho contrato finalizará cuando hubiese dos años consecutivos de ejercicios económicos negativos, como así ha sucedido.
Sobre la actuación del bipartito
En otro momento de su intervención el diputado ‘popular’ se refirió a la gestión del bipartito al frente del Ejecutivo gallego como una de las causas de la difícil situación económica que atraviesa el hospital del Centro Gallego de Buenos Aires. En concreto, explicó que la decisión de poner en marcha la obra social Ospaña supuso una modificación del fin fundacional de la Fundación, “un paso que no fue muy bien dimensionado” por sus promotores.
“Fruto de ello -afirmó Santalices- la Fundación entró en una carrera desbocada de deudas que haría muy complicada su viabilidad económica y legal”. Y añadió que “la actuación de los anteriores gestores produjo un constante endeudamiento”.
En el texto alternativo del PPdeG se instaba al Gobierno central a que sufragase la deuda originada a causa de la creación de la obra social Ospaña.
Asimismo, Santalices recordó que la Xunta ya ha anunciado que seguirá apoyando al Centro Gallego y al hospital así como a todas las entidades gallegas en el exterior y señaló que con la extinción de la Fundación la gestión del hospital volverá a manos de la directiva del Centro Gallego de Buenos Aires, una vieja reivindicación de la entidad.
Finalmente, el Parlamento de Galicia rechazó la proposición del BNG por la que se instaba a la Xunta de Galicia a mantener la Fundación Galicia Saúde. Esta propuesta que contó con el apoyo del PSdeG añadiendo una enmienda para que el mantenimiento de la Fundación contase con la financiación suficiente.
En el debate de la iniciativa presentada por la diputada nacionalista Teresa Táboas, los grupos de la oposición, que apoyaron en el Congreso de los Diputados la reforma de la Ley Electoral, criticaron al PP al entender que la decisión de extinguir la Fundación Galicia Saúde estaba relacionada con el hecho de que la nueva normativa elimina la participación de los emigrantes en los comicios locales. Tanto Táboas como el portavoz de Emigración del PSdeG, José Luis Méndez Romeu, criticaron a la Xunta al considerar que la actuación en materia de emigración se mueve por un “bochornoso oportunismo electoral”, según palabras del diputado socialista.