El movimiento ‘Galicia Por Un Nuevo Centro Gallego’ dio a conocer su proyecto de reorganización de la gestión del hospital del Centro Gallego de Buenos Aires elaborado por el doctor Ivo Malach, exdirector médico de la institución.
Luego de una breve reseña sobre los objetivos del mutualismo y los orígenes del Centro Gallego, el documento, al que tuvo acceso España Exterior, afirma que según los Estatutos de la entidad, está claramente establecido que el Centro Gallego debe cumplir sus funciones de mutualismo en las áreas de Salud, Cultura y Servicio de Ayuda Económica Mutualista: “De las tres áreas nombradas, la Salud es el punto de interés del presente proyecto, pues de persistirse con la actual organización y modo de gestión que originó el colapso de la institución, ésta quebrará indefectiblemente”.
Según explica el doctor Malach, una vez finalizada la intervención del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (Inaes) y devuelta la conducción de la gestión a los socios, las autoridades que asuman “deberán inexcusablemente proponerse un plan de renovación de los Estatutos que ajuste los integrantes de la Junta Ejecutiva a un órgano más pequeño pero más dinámico y le permitan interpretar el nuevo rol en los procesos de gestión sanitaria”.
En ese sentido, propone disminuirla a no más de diez personas ejecutivas más tres miembros en la Comisión Fiscalizadora, con el mandato de establecer la gobernabilidad: “Esto podría recaer en un Gerente General seleccionado por la Junta través de un concurso o bien en la tercerización del gerenciamiento con alguna empresa con antecedentes en el área de la salud, también por concurso”.
En la misma tónica, agrega: “Debe comprenderse que la propuesta es imprescindible para crear un sistema de Gestión Empresarial moderno que posicione en el tiempo a la Institución como modelo de un Hospital de Comunidad. Esto permitirá adecuarse a las modificaciones que el ámbito político y económico-financiero produzca. Se trata de una transformación orientada hacia la construcción, implementación y monitorización de una competitividad para garantizar la persistencia y el perfeccionamiento de la organización a largo plazo”.
Según explica, a través del Proceso de Gestión Estratégica elaborado se ha determinado que la misión del Centro Gallego en esta nueva etapa no puede ser la misma que la que tuvo a inicios del siglo XX. “No se trata de proteger la salud exclusivamente de socios mutualistas, sino, y de acuerdo a los Estatutos actuales, la de socios-dueños que alcancen a financiar la protección de su salud mejorando la cantidad y calidad de los servicios prestados. Pero como además el Hospital del CGBA está integrado como prestador de salud dentro del marco actual del Sistema Nacional de Salud, también el financiamiento deberá fortalecer el patrimonio institucional con el mejoramiento de la tecnología médica y administrativa”, recalca.
El exdirector médico del hospital del Centro Gallego reconoce que la tarea no será fácil para quien asuma la conducción de la entidad: “En poco tiempo más la Junta Directiva desplazada por la Intervención deberá asumir nuevamente la conducción de la Institución, y en peores condiciones económica financieras a cuando se les arrebató. Mayores problemas acechan, dado que la Intervención, al igual que en otro tiempo la Fundación Galicia Saúde, nada hicieron para modificar la Estructura de organización del Hospital; muy por el contrario, la mala gestión deja un serio problema económico financiero que deberá asumirse y revertir”.
Un paso fundamental que deberá tomar la conducción que asuma será el de “desorganizar el apego a un sistema estructural profesional y administrativo de carácter vertical y nostálgico, con el que los empleados especulan que les permite sobrevivir. La responsabilidad por el uso racional de los recursos y el control de los costos debe involucrar a todos, incluyendo a los socios”.
En la misma línea, agrega: “Se propone un nuevo tipo de organización del Hospital, abandonando el riguroso sistema vertical con un único responsable de la pirámide, a un sistema horizontal de trabajo en equipo dirigidos por uno o dos líderes/gerentes. Es adecuar una estructura pasiva e inconexa a una situación horizontal dinámica de trabajo en equipos, claramente competitiva y de la cual el Hospital hoy carece”.
Malach propone entonces un nuevo modelo de organización basado en dos Unidades Modulares con características gerenciales: el director médico y el director de la Dirección Estratégica Administrativa o gerente general, a cargo de distintos equipos que surgen de los distintos departamentos y servicios de la organización vertical, pero que ahora pasaran a constituirse en unidades.
“El concepto es que la gestión de las unidades otorgue una visión global al líder del equipo respectivo y que, con la información de los restantes equipos, demuestren el grado de eficacia y eficiencia con la que se trabaja. Esto permitirá apoyar el proceso de toma de decisiones poco o semiestructuradas, como son las de máximo nivel gerencial del Hospital”, subraya.
El extenso documento, en el que no son escasas las referencias a aspectos técnicos sobre la gestión de entidades sanitarias y que cuenta con numerosos diagramas explicativos, resume: “A través de estas sugerencias se pone a disposición de los directivos del Centro Gallego de Buenos Aires una herramienta para cumplir con el rol de ser una Empresa de Salud de reconocido prestigio nacional, con autonomía económica financiera, y con fortaleza suficiente para competir dentro del Sistema Nacional de Salud”.