El Centro Asturiano Casa de Asturias de Montevideo se proclama campeón por tercer año consecutivo de las Olimpiadas de Juegos de Salón

Más de medio millar de personas acudieron a la entrega de premios

Los asturianos con la copa de campeones.
Chavela recibió el Premio Quijote de manos de Martín Rodríguez Caridad.
El Centro Pontevedrés logró la segunda plaza.
Los asturianos con la copa especial de los 100 años de Casa de Galicia.

La 44ª edición de las Olimpiadas de Juegos de Salón que organiza la Liga Española de Deportes del Uruguay coronó por tercer año consecutivo al Centro Asturiano Casa de Asturias como el campeón, alzándose con los dos mayores trofeos.

La noche del pasado 25 de noviembre el Centro Ourensano de Montevideo alojó a más de medio millar de competidores y familiares en la jornada final de la que fue la 44ª edición de las Olimpiadas de Juegos de Salón que organiza la Liga Española que preside Martín Rodríguez Caridad.

Fue justamente él quien agradeció a sus colaboradores de la directiva, neutrales de estos juegos y a los delegados de los clubes participantes, reconociendo una gran alegría porque el Centro Pontevedrés que se había retirado hace un par de años por una controversia ante un fallo, volvió a integrar la Liga completando así las siete instituciones que durante dos meses compiten todos los viernes visitando los clubes y celebrando todas las noches al fin de las competencias con una cena de camaradería.

De esta manera se consiguen crear verdaderos lazos de unión y solidaridad dentro del colectivo español con la excusa de una competencia deportiva.

El consejero de Empleo y Seguridad Social, Benito Díez Arce, también expresó que “mucho aprendemos de ustedes” que conforman una unidad entre todos los españoles.

La otra autoridad española que estaba presente era el jefe de la Oficina Laboral, José Martín Blanco, seguramente en una de sus últimas presencias en actividades del colectivo español ya que será trasladado el próximo mes.

Vuelven a arrasar

Las siete instituciones participantes lograron dispares resultados en las seis jornadas que se disputaron, alcanzando el Centro Asturiano Casa de Asturias del Uruguay los 264 puntos y consagrándose así, por tercer año consecutivo, campeón de las Olimpiadas quedando el trofeo en su poder, al tiempo que también recibieron el trofeo especial de este año otorgado por los ‘100 años de Casa de Galicia’.

Como subcampeón se clasificó el Centro Pontevedrés, a seis puntos del ganador, en tanto el Valle Miñor logró el tercer puesto con 255 puntos. Por su parte, el Club Social Cutcsa llegó al cuarto puesto, con 228 puntos, el Centro Gallego fue quinto, con 223, Alma Gallega sexto, con 212 puntos, y Casa de Galicia último, con 202 puntos.

Así es como los asturianos, por segunda vez en este siglo, han conquistado tres olimpiadas consecutivas por lo que la vitrina de su sede tendrá que agrandarse o hacer lugar para colocar en esta oportunidad dos grandes trofeos más.

Los campeones por juegos han sido del Pontevedrés, en dominó Eduardo Alonso y Ángel Paz; en brisca Luciano Martínez, Elisa Pena y Venera Pena; en truco A Carlos Aguilar y Gustavo Pintos.

Por su parte, el Valle Miñor conquistó la rana femenina con Nelly Torres, la escoba con Jorge Saa y Juan Saa. Casa de Galicia obtuvo el trofeo de cerca da raia con Ignacio Adán; y el Centro Gallego la rana A con Gabriel Rial, la escoba femenina con Francisca Muiños y Manuela Castiñeiras, y la conga mixta A con Alejandra Rial.

El Club CUTCSA fue campeón en rana B con Rodolfo Piqué, el tute B con Francisco Castro y Juan Luis Castro, y la conga mixta B con Mirita Hernández.

Alma Gallega, al igual que Casa de Galicia, conquistó un solo primer puesto, esta vez en el mus con la pareja de Ricardo Reyes y Fernando Cereijo.

Sin embargo, el campeón Centro Asturiano Casa de Asturias, fue primero en cerca da raia femenina con Fiorella Sousa; en tute A con la pareja Cesáreo Ferro y José María Pérez; en truco B con Miguel Suárez y Juan Barrios, y en conga femenina, con Nelly Díaz.

Premio Quijote

Para finalizar la fiesta el Premio Quijote Especial fue otorgado María Isabel Sánchez, más conocida como Chavela, una neutral integrante de la Comisión Directiva de la Liga Española de Deportes desde pequeña y donde “aprendí a amar la liga desde que acompañaba a mi padre en los inicios cuando él era presidente”, según dijo. Con mucha emoción y lágrimas en los ojos agradeció el premio que recibió.

Todos los presentes jalearon a Chavela y su nombre fue coreado ya que ella, además de organizar, también resuelve o intenta al menos hacerlo, cada uno de los problemas que muchos de los trescientos deportistas tienen en las noches de competición.

De esta forma se cerró otra edición de las Olimpiadas de Juegos de Salón que, por supuesto, culminaron con el grito de campeón de los asturianos y las felicitaciones del resto de las entidades participantes porque, en definitiva, la competición no es más que una excusa para estar más unidos.